Últimamente nadie había molestado a los alrededores de Park, y aunque estaba en paz gracias a las faltas, sentía un mal presentimiento y raro al no ser molestado.
Una ola de sentimientos paso por su estómago al sentir ese mal presentimiento, y mientras ordenaba los documentos para ingresar a la institución local, una ventana se rompió, e hizo estremecer a Park, que miedoso se levantó de la silla y salió de su habitación en busca de la ventana rota, y era la misma ventana principal del corredizo. Miro a la pared al ver donde había caído la piedra, y está también había estrellado contra un cuadro.
Ese cuadro robo toda su atención, apenas se había dado cuenta de el, el estrés de su cambio de vivienda lo había entretenido tanto, para no percatarse de esa fotografía.
Una foto que parecía tener varios años, una dónde se alcanzaba a ver a la perfección el rostro de su abuela; su abuela que siempre había sido fría y seca con el, estaba sonriendo en esa foto. A su lado había un señor con rasgos asiáticos, abrazándola de la cintura, y enmedio de ellos un niño que sonreía juguetón.
Podría jurar que era una bella familia, una feliz y pacífica; aunque sabía que su abuela jamás había tenido un hijo que no fuera su padre. Y el niño sonriente de ahí, no era su padre, y el señor junto a ella no era su abuelo.
Era el señor Min y su hijo.
Lleno de rabia, tomo el cuadro en sus manos, quitándo de la pared, arrojo el cuadro hasta el final del pasillo, haciendo que se escuchará como el vidrio del cuadro rompiera.
Los recuerdos de las pláticas que le contaba su padre, decían que la abuela era una persona seca con su abuelo y el, y podría recordar que pareciera que les odiaba. La abuela era cruel con su padre, y casi nunca la pasaba en su casa, algo que causo un trauma en el, algo que heredó. Su padre tampoco fue alguien cariñoso, y ni cercano, y sabía que era culpa de la abuela.
Ahora casi sentía el mismo sentimiento de odio a su abuela que el del vecindario, solo que diferente. Mucho más.
Sin más remedio, agarro el ladrillo del piso, y lo acomodo en el borde de la ventana, y entro a su habitación de nuevo.
Al sentarse de nuevo, miro a la cama, dónde estaba recostado el cálido muñeco. Y al mirarlo solo sintió pena por el.
De cierto modo era de su abuela, y había sido aventado en el cuarto de limpieza, había sido olvidado.—La abuela es cruel, ¿O no? —Sonrio, y echo la cabeza hacia atrás, mirando el techo en frustración.
el timbre sonó una vez.
Jimin no se percató al estar dormido.
Volvió a sonar, pero dos veces seguidas.
Y algo sonámbulo, se levantó de golpe, y puso sus pantuflas dispuesto a ir a ver quién era.
Volvió a sonar, solo que varias veces durante un rato.
Algo apresurado bajo las escaleras enmedio de la oscuridad de la gran casa.
El timbre dejo de sonar.
Sin pensarlo, sin darse cuenta, abrió la puerta sin preguntar: — "¿Quien es?"
Antes de abriste por completo, alguien la abrió antes que el, haciendo que cayera al piso. Despertó por completo, y logro ver la silueta de seis personas paradas, dándole la luz de los faros a sus espaldas. Y uno de ellos pudo sacar un objeto filoso de su abrigó.
—Hasta aquí llegaste Park.
Por instinto, se levantó como pudo, y corrió a la pasillo que llevaba al jardín. Mientras que el terror de saber que las personas le estaban siguiendo a sus espaldas.
Tropezó con muebles, floreros, estuvo a punto de caer al piso, pero ahora su única neurona que servía le decía sobrevive.
Con dificultades, llegó a la puerta, y miro a todos lados buscando donde escapar, pero los muros de madera eran bastante altos.
Salió por completo del jardín, al estar casi enmedio, miro a su espalda, viendo a la gente salir y caminar lentamente hasta el.
Retrocediendo, mirándolos fijamente mientras que empezaban a esparcirse enfrente de el.
Casi pudo soltar un sollozo, al ver que uno de ellos tenía a su muñeco colgando de la mano. Y sonrió el tipo al ver esa reacción en el.
—Aprecias mucho esto ¿no? —lo alzó entre los aires, mientras sonreía gustoso, y Jimin solo suplicaba que no le sucediera algo a el.
—Estúpido. —Y lo levanto más alto y agarró más vuelo para poder asotarlo en el piso, haciendo que el rompiera en millones de piezas y la porcelana esparciendose entre todo el pasto.—¡Noo! —Chillo Jimin, al ver a su hermoso muñeco de porcelana romperse. Soltó lágrimas.
Ahora que todo estaba roto, solo quedaba la ropa y el peculiar papelito.
En lo que 5 chicos se acercaban a Jimin más, uno se detenía a ver ese pepel.
Jimin retrocediendo, tropezó con algo y callo, aunque algo debajo de el se rompió abriendo paso a un hoyo que dejo caer más abajo.
Levantó el papel y leyó.
—"algún día encontrará a la persona a quien protejer, como yo lo encontré contigo"
-PKY Jimin cayó en los brazos el alguien. Y aquel tipo solo tosió sangre.
Y saliendo de ese lugar con Jimin en Brazos, solo pudo mirar el chico con una furia por haber afectado a el.
Dejo a Jimin en el pasto cuidadosamente, quien se había desmayado por tal impresión, y dejo un beso en su frente.
La crueldad solo era un sentimiento, o eso creían, no hasta ver a la misma crueldad en carne y hueso.
El había vuelto, más desquiciado como nunca, con más odio reflejado en sus ojos, y el objetivo eran ellos, lo sabían. Tenían terror.
El había vuelto, Min...
...Min Yoongi había vuelto.
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porcelain doll [YJ]
Science Fiction"algún día encontrará a la persona a quien protejer, como yo lo encontré contigo" -PK