ꗃ Hoseok y Hosuk son gemelos pero mientras uno prefiere una tarde tranquila con un café helado, otro quiere irse a las Vegas y gastar por montones.
Esta historia está centrada en un hermano y como sin saberlo, y por culpa del destino (y de su gemel...
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Hoseok oyó cómo Yoongi reía alegremente ante un comentario de su hermano y ese sonido, antes tan familiar, lo entristeció. Ese día, Yoongi se había puesto unos pantalones ajustados y una camisa caqui y estaba tremendamente atractivo. Su corazón dio un vuelco cuando lo vio y sintió el impacto que el mayor le ocasionaba dentro de él. Ninguna persona lo había afectado nunca como lo hacía Min Yoongi.
El menor suspiró, volviendo su atención hacia los platos sucios en el fregadero. Era la tarde libre de Sora, WheeIn y él estaban limpiando los platos del almuerzo.
—Dirás que me meta en mis asuntos —dijo WheeIn mientras tomaba un plato para secarlo— pero, ¿quieres que hablemos?
Hoseok miró a la mujer, que la miraba a su vez con un aire de comprensión que le desarmó. Tuvo que apartar la mirada y aclararse la garganta para contestar:
—No sé a qué te refieres —mintió.
Inmediatamente sintió una mano amiga en su hombro.
—Sé que les está pasando algo. No es que sea muy obvio —aclaró rápidamente ante la expresión asustada de Hoseok—, pero lo digo por intuición, la intuición de una persona enamorada, además. No eres feliz y me gustaría ayudarte, si puedo.
Hoseok no contestó inmediatamente. Siguió mirando por la ventana a los dos hombres que estaban jugando con la pelota en el jardín. Estaba cansado de negarlo.
—No puedes hacer nada.
—Pero...
—Créeme. Esto es algo que sólo Yoongi y yo podemos arreglar. Por favor, no se lo digas a nadie —le interrumpió Hoseok.
—Claro que no —respondió WheeIn rápidamente—. Además, GeumJae no se da cuenta de esas cosas. Yo estoy empezando a pensar que voy a tener que ponerme una corona de flores para que se fije en mí —añadió con una sonrisa.
—Sí, ahora sólo le presta atención a su hermano —dijo Hoseok devolviendo la sonrisa acorazonada y mirando por la ventana, pensativo.
Sus pensamientos se vieron interrumpidos por el sonido repentino del teléfono.
—Ya voy yo —dijo WheeIn dirigiéndose al teléfono. Escuchó durante unos segundos, con cara de preocupación y fue hacia la puerta. —Es para ti, GeumJae—llamó.
Los dos hombres se acercaron a la casa.
—Yoo Kihyun—dijo alargándole el teléfono.
Hoseok dejó de lavar los platos. No tenía ni idea de quién era Yoo Ki-hyun pero, por la cara de preocupación de los tres, estaba claro que no era una llamada de cortesía.
—Se ha perdido un niño. Estaba de acampada con su familia y no se han dado cuenta de que se había perdido hasta hace un rato. Están reuniendo voluntarios para salir a buscarlo y Kihyun quiere que miremos en el lago. Ya hay un grupo de gente en el otro lado, así que sugiero que crucemos y nos reunamos con ellos, Yoongi.
