Ven aquí, y ámame (BounPrem)~ Omegaverse

~ DIEZ ~

Kim una omega se acomoda su blusa para que si escote resaltara aún más, arregla su cabello, frente al pequeño espejo que tiene dentro de su casillero, se aplica brillo labial por última vez y cierra la puerta, dirigiéndose a donde estaba cierto alfa de cabello rubio acomodando sus cosas.

- Hola Boun. – Pasa sus manos por sus pantalones ceñidos y sonríe.

El rubio la mira, pasando su vista por todo el cuerpo de la omega, luego parpadea un par de veces y vuelve a su tarea de ordenar sus libros. Su rostro neutro, sin ninguna expresión en especial, pero su mandíbula estaba apretada fuertemente.

- Mi celo se acerca y me preguntaba si ... -  El rubio interrumpe la oración de la omega.

- No. – dice cerrando su casillero, poniéndose la mochila sobre el hombro.

- Pero...

- Muévete, necesito resolver algo. – Habla rudamente y ella asustada se hace de inmediato a un lado.

Boun camina, con humo saliendo de sus orejas, gruñendo internamente cuando su alfa también lo hace, celoso ante la escena frente a sus ojos. Prem está abrazando a Pavel él desconoce la razón, y tampoco quiere conocerla, pero lo que si quiere es que Pavel suelte en ese mismo instante a Prem.

- ¡Boun! – Prem chilla cuando es jalado hacía atrás, el castaño reconoce al alfa por su olor y brutalidad.

- ¡Mierda! Boun, puedes lastimarlo así, o al bebé. – su primo dice alarmado.

- Nunca le haría daño a mi cachorro. - El alfa olfatea el cuello de Prem, lo más discreto que puede.

En los últimos días el olor del omega se había intensificado, volviéndose más dulce y adictivo. Era eso o que cada vez su celo estaba más cerca.

- Como digas. – El omega se aparta, arreglando su cabello. – Estaba hablando con Pavel de su cumpleaños.

- Hare una fiesta el viernes de la próxima semana, daré invitaciones y todo eso. – Trata de explicar el primo del rubio.

- ¿Por qué te abrazaba? – dijo seriamente el rubio a su omega.

- Porque quise. – el castaño cruza sus brazos de forma desafiante. En realidad, parecía más un gatito rogando por caricias, en vez de un lobo intimidante.

- Ajá, sí, vamos Prem. – Boun toma la mano del castaño comenzando a caminar.

- ¡Nos vemos después Pavel, para lo de la asesoría! – Le grita, siendo arrastrado por el pasillo. – Me estás lastimando el brazo. – Dice soltándose del agarre fuerte del alfa.

- Lo siento

- Eres muy brusco, no quiero que seas así con el bebé. – le reclama el castaño, frunciendo su ceño.

- No lo seré. – responde seriamente el alfa.

Prem suspira acompañado de un pequeño ruidito de inseguridad.

- ¿Por qué te molesta verme con tu primo?, él es mi amigo. – susurra al rubio, mientras acaricia suavemente el brazo que el alfa le había apretado.

- Porque no me gusta. – Dijo Boun secamente.

- Pero no es ... El castaño iba a debatir las palabras del rubio, cuando este lo interrumpe.

- Me pone celoso ¿Ya? – revela el alfa con ojos oscurecidos.

- No tienes por qué. Tú mismo dijiste que no soy tu omega, entonces yo tengo que buscar un alfa. – respondió el castaño bajando la mirada, no le gustaba pensar en aquello, pero Boun ya le había dicho que no era su omega.