Narra _____:
Desperté por el movimiento que ya comenzaba en el pueblo, me aliste y baje por mi desayuno.
- ¿Ya lista? - Preguntó mi mamá viéndome bajar las escaleras.
- Así es, buenos días - Dije tomando asiento.
- Buenos días, que lo disfrutes. - Dijo dejándome el plato lleno de comida frente mío.
- ¿No desayunas tú? - Le pregunté.
- Ya lo hice, solo que tu bajaste tarde. -
- ¿TARDE? - Voltee a mirar el reloj, iba retrasada, demasiado retrasada.
Me metí la comida que pude en la boca y tome un sorbo de jugo, tome mi morral y corrí a la puerta.
- Cariño tranquila... - Dijo mi mamá viéndome correr por toda la casa.
- Voy tarde ma, lo siento, volveré un poco tarde iré a la casa Madrigal ¿esta bien? - Dije ya en la puerta a punto de irme.
- Okey pero con cuidado y que Camilo te traiga a casa. Con cuidado. - Me abrazo y me fui.
No tuve noción pero en un abrir y cerrar de ojos ya estaba por llegar a la plaza y vi a Camilo ya con los niños.
- Lo siento mucho... - Dije agitada recuperando un poco de aire.
- Llegas tarde niño - Dijo Camilo señalando el reloj de la iglesia convertido en mi, imitando lo que yo había hecho un día anterior a lo que los niños soltaron carcajadas y lo mire seria.
- Ya estamos a mano. - Le dije.
(...)
- Eso fue todo por hoy chicos, nos vemos mañana, cuídense. - Ya era la hora de comer y la mayoría de los pueblerinos ya habían concluido sus tareas del día.
Camilo y yo nos aseguramos de que sus padres recogieran a los pequeños y cuando estábamos por irnos se acercó a mi uno de los niños.
- Toma, te lo envía mi hermano - Extendió su manita y me dio una hermosa bugambilia.
Alcé la mirada y un chico me miro y me saludo tímido desde lejos.
- Dile que gracias... - Le dije con una sonrisa al pequeño y este salió corriendo.
Voltee a mi derecha y Camilo me miraba.
- ¿Qué pasa? - Claramente su mirada me intimidaba.
- ¿Lo conoces? - Preguntó.
- ¿Al pequeño? Si, viene diario. - Sabía a quien se refería pero era entretenido ver a donde quería llegar.
- Que chistosa, sabes a quien me refiero. - Me seguía mirando.
No era nada tonto y yo solo sentía nervios por su mirada.
- Jamás lo había visto, pero al parecer esta hermosa flor le recordó a mi. - Dije haciendo muecas exageradas.
- Vamos a casa, tenemos que llegar cuando aún siga caliente la comida.- Me tomo del brazo y emprendimos camino a la gran casa Madrigal.
En el camino venía callado, algo muy extraño en él.
- Al parecer esta flor es de las que hizo hoy Isabela en la plaza. - Dije rompiendo el hielo.
- Es linda. - Dijo serio.
Me rendí y mejor acelere el paso para que llegáramos mas rápido.
(...)
- Llegamos. - Anunció Camilo en cuanto entramos.
La verdad era que casi no había convivido con toda la familia en sí, pero me trataban como a una hija más y era acojedor estar aquí.
- Justo a tiempo, hola chicos. - Dijo saludando Julieta.
Nos dirigimos al comedor y ya estaban todos ahí.
- ¡Hola a todos! - Salude en general.
- Que agradable visita _____, que gusto tenerte aquí. - Dijo la abuela Alma invitando a que me sentara.
- El gusto es mío. - Tomamos asiento y comenzamos a deleitarnos con lo preparado por Julieta.
Comenzaron a charlar sobre el posible compromiso de Dolores y Mariano, querían ir despacio pero a la vez los dos ansiaban por comenzar una vida juntos. Dolores cambio de tema y seguimos comiendo.
Comenzó la sobremesa y comenzaron a charlar los adultos, Mirabel, Isabela, Luisa, Camilo y yo nos levantamos de nuestros asientos y comenzamos a recoger la mesa.
- ¡Hoy le tocan los trastes a Camilo! - Grito Félix desde el comedor.
- Ya lo seee - Dijo Camilo doblando sua mangas listo para enfrentarse contra los platos sucios.
- ¿Cuando acabes hablamos? -
- ¿Hablar de qué? - Dijo detrás mío Isabela.
- N-nada, solo cosas para mañana los niños. - Dije con una risa nerviosa.
- De verdad no entiendo como lo soportas, te admiro _____ - Dijo con el afán de molestarlo.
- Como que alguien quiere que me convierta en la antigüa Isabela. - Dijo amenazando.
Al parecer Isabela antes era muy diferente a como la conozco ahora, según Camilo era muy perfeccionista y todo color rosa y morado, no me la imaginaba así hasta que Camilo un día en broma discutiendo con ella se convirtió en esa versión y esta estalló en furia.
- No te atrevas. - Dijo seria, sabía que Camilo si era muy capaz.
Yo solo reía con verlos discutir.
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»Todo Lo Que Quiero« ๑Camilo Madrigal Y Tú๑
Fanfic『Todo lo que quiero no es nada mas que escucharte tocar mi puerta, por que si pudiera ver tu rostro una vez más podría morir como un hombre feliz, estoy seguro. Cuando dijiste tu último adiós morí un poco por dentro, me acosté en mi cama llorando t...