CAPÍTULO 8

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-Disculpa Dina, yo sólo quería que descansaras para que estuvieras mejor, no puedes ir así a la escuela-dijo disculpándose.

-Lo siento, últimamente creo que he sido muy agresiva contigo, la verdad no sé que me pasa, jamás me había comportado así- dije en modo de lamento.

-Esta bien, por un momento pené que yo te caía mal-dijo soltando una risita.

-Claro que no-dije sonrojandome.

En ese momento mi celular suena, "quién podrá interrumpir este momento?"pensé.

-¡MI MADRE!-dije alarmada. -¡Oh por dios!, es mi madre- dije asustada con el teléfono el la mano.

-Pues contesta,dile que estás bien.

-Si me bajaras podría contestar mas agusto-dije intentando hacer que me soltara.

-No, puedes contestar así, anda- dijo.

-Hola?..m..mamá?- contesté cautelosamente.

-DINA..dónde rayos estás, vine a tu habitación y no te encuentro por ningún lado, dime dónde estas para ir, estás con Nancy?- me preguntó mi madre alarmada.

Nancy es mi mejor amiga, he estado con ella desde la secundaria y aunque ha sido muy poco tiempo se convirtió en una persona muy importante en mi vida, nunca me ha fallado y yo tampoco a ella. Es alta, un año menor que yo, de tez blanca, pelo castaño, ojos color miel, muy divertida y ocurrente, es como mi hermana, coincidimos en todo.

-No mamá, no estoy con Nancy, estoy con...con un amigo, es un compañero de la escuela, vine a entregarle algo y se me fue el tiempo, ahora mismo regreso a la casa no te preocupes- dije finalizando la llamada.

-Como veras me tengo que ir, así que si no te importa- dije mientras trataba de bajarme. Aunque mis intentos fueron inútiles no me arrepentí de hacerlos, Derek me llevó en sus brazos hasta la puerta de mi casa, tocó el timbre y mi mamá abrió la puerta..por qué me pasa esto?

-Ammmmm...Buenas Noches?-dijo mi madre desconcertada. 

-Yo estoy tan desconcertada como tu, créeme-dije volteando los ojos.

-Buenas noches señora, soy Derek amigo y compañero de Dina- dijo saludando a mi madre.

-Hola Derek, mucho gusto, soy Becca la mamá de Dina- dijo un poco menos sorprendida.

-Dina se lastimó el tobillo, debe decirle a su hija que tenga más cuidado con las alfombras asesinas- dijo riendo.  "AH OK, ahora yo soy la torpe, te recuerdo que a ti se te derramó una lata de soda", pensé.

-JA JA, que gracioso- dije sarcásticamente.

-Hay Dina, lo importante es que ya estás en casa, Derek serías tan amable de llevarla a su habitación, voy por algo para desinflamar ese tobillo, enseguida subo- dijo mi madre mientras caminaba rápidamente hacia su habitación.

Derek obedeció la indicación de mi madre yo le indiqué el camino. Al llegar me recostó sobre la cama y después se sentó a un lado de mi.

-Dina, quiero que sepas que el haberte conocido me dio muchísimo gusto, aunque apenas sea casi un día, eres muy divertida, adorable, me siento bien estando contigo, eres muy bella y solo quiero que me disculpes por el incidente de hace rato, la verdad no quiero que pienses mal de mi, yo no suelo tener a chicas en mi casa ni mucho menos besarlas así de la nada, es solo que tu...tu eres..- 

-Aquí está- llegó mi mamá interrumpiendo a Derek...rayos..es solo que yo que..yo que? pfff.

-Gracias ma, no hace falta estoy bien-dije tratando de que se calmara.

-Cómo que no hace falta, ese tobillo está muy hinchado- dijo mientras me quitaba la zapatilla y me untaba la crema.   -Creo que sería todo Derek, has sido muy atento con mi hija, no quiero correrte pero vete, ya es muy tarde, gracias-continuó mi mamá sin dirigirle la mirada.

-¡MAMÁ!- le reproché. -Disculpa Derek, gracias por todo pero creo que es mejor que vengas mañana- le dije tratando de agradecerle todo lo que hizo por mi.  "GRACIAS POR TODO" le susurré, mientras se alejaba.

-Si, descuida, vendré a visitarte mañana para ver como sigues, con su permiso señora que pase buena noche- dijo educadamente mientras se iba.

-Quién es ese chico Dina?- preguntó mi mamá alzando la mirada, parece que ya había terminado de untar esa cosa extraña de color verdoso...oh no aquí viene el interrogatorio.

-Es solo un amigo que conocí hoy en la preparatoria, nadie en especial, no tienes de que preocuparte, mejor ve a dormir ya es muy tarde- contesté tratando de que esto terminara pronto.

-Preocuparme?...no lo había pensado pero ya que lo mencionas- dijo dudosa.

-Madreeeeeeeeeee-dije reprochando.

-Esta bien, está bien, te dejaré dormir, pero sabes que puedes confiar en mi cariño, aquí estaré, te quiero- dijo dándome un beso en la mejilla mientras se marchaba.



UN AMOR SOBRENATURALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora