seis

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Latas de cerveza, botellas de tequila, la música resonaba a todo volumen en la playa donde se llevaba a cabo aquella fiesta, la cual había sido hecha con el único propósito de alcoholizarse, besarse con otras personas y para algunos drogarse.

Decir que era sorprendente que en las tiendas le vendieran alcohol a un adolescente era mentira, un buen soborno y con eso podías comprar alcohol y cigarrillos, o una buena cantidad de dinero y no serías arrestado por un oficial.

No importa que hagas, mientras seas blanco siempre tendrás privilegios, pero si eres afrodescendiente, asiático, latino o simplemente no eres un estadounidense, a los ojos de la ley siempre serás un criminal o no serás una buena influencia.

Las risas de la gente sonaban por todo el lugar, había un chico de aproximadamente 20 años, quien era el dj, y quien se encargaba de poner las mejores canciones de nirvana, Queen, Michael Jackson, Madonna, ABBA y entre otros artistas muy populares.

-Por fin llegan, Yoongi y yo hemos estado esperándolos durante media hora. -Exclamó el peli naranja, quien tenía en su mano su tercera cerveza de la noche, Jimin era alguien con una suficiente tolerancia al alcohol, tanto tiempo ingiriendo dicha bebida de cierto modo le había hecho tenerle más resistencia, por lo que emborracharse era un poco más difícil que al comienzo.

-Lo sentimos, nos entretuvimos hablando, ¿no ha pasado nada interesante? -Preguntó la japonesa mientras ataba su cabello.

-Pues nada fuera de lo común, tomamos algunas cervezas, bailamos y comimos un poco, no queríamos hacer mucho hasta que ustedes llegaran, vengan, vayamos por algo de tomar. -Indicó Yoongi, dirigiéndose con sus amigos a una gran mesa de comida, donde docenas de botanas y bebidas -Principalmente alcohol- estaban a disposición de todos.

Un par de frituras y 3 cervezas fueron tomadas por el grupo de amigos, quienes buscaron un lugar dónde sentarse, sin embargo no había muchas opciones, y cuando finalmente encontraron un lugar se sentaron, era un simple tronco de alguna palmera caída, pero era mejor eso a tener que estar sentados sobre la arena.

-Pronto se van a acabar las vacaciones y aunque fuimos a demasiadas fiestas y salimos demasiado siento como si no hubiera hecho nada. -Exclamó Jimin, quien le dio un trago a su cerveza.

Para él sentirse de ese modo no era nada nuevo, la mayor parte del tiempo estaba fuera de casa, intentando olvidar un pasado desgarrador que lo atormentaba con preocupante frecuencia.

Intentando ser feliz, le gustaba engañarse a sí mismo, hacerse creer que era feliz, que tenía una vida perfecta, que su padre estaba presente.

Le gustaba engañarse a sí mismo haciéndose creer que nunca quiso saltar desde ese edificio, que nunca deseo morir.

-No recuerdo la última vez que ensayamos como banda, deberíamos volver a hacerlo. -Opinó Jungkook, quien comía frituras a gusto.

-Ahora que lo pienso, deberíamos estar ensayando, podríamos ensayar mañana, Jimin y yo no tendremos nada que hacer, nuestros padres no volverán hasta mañana por la noche del hospital.

-Vayan mañana a mi casa, mis padres saldrán a una boda a las 4, a esa hora podemos comenzar a ensayar.

-Extraño verlos tocar, es muy entretenido. -Opinó Yoongi, había asistido a sus ensayos un par de ocasiones, y aunque fueron pocas, fueron más que suficientes para que los admirara con todo el talento para la música que llevaban.

-Pero no es lo mismo si no estamos todos ¿por qué no intentas tocar con nosotros? podrías ser nuestro tecladista. -Propuso Jimin, viendo a Yoongi, quien sonrió fascinado con la idea, pero negó con la cabeza.

Boys just want to have fun ||Yoonmin||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora