Tercera parte de la serie de libros 'Scream', ambientada un año después de los eventos de 'New Killer, New Rules'.
Nara Vasilakis, está tratando de superar lentamente los traumas de su pasado.
Ha escapado de las garras de dos locos asesinos en seri...
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El detective Kincaid caminaba de un lado a otro en su oficina con una Gale maltratada y magullada sentada cerca de la pared, vestida con un uniforme de oficial de policía ya que su atuendo anterior había sido absolutamente incinerado.
"Ok, mira. Todos sabemos que esto tiene algo que ver con STAB 3. Lo que no sabemos es por qué el asesino sigue dejando artículos sobre Helene Vasilakis", dijo Gale, pasando un dedo por el borde de la taza caliente que sostenía.
"En realidad, hubo más esta vez. También encontramos una imagen".
Ella levantó la barbilla con incredulidad. "¿Qué?"
Kincaid levantó una segunda bolsa de pruebas con cierre hermético. Dentro había un 5x4 de Helene saliendo de una habitación de hotel con Cotton Weary.
Luego le mostró la parte de atrás que tenía escrito 'NOSOTROS LA MATAMOS', su mandíbula se tensó. "Parece que estamos lidiando con múltiples asesinos".
"Así que Nara tenía razón", supuso Gale, bajando la cabeza para ver mejor. "Esos bastardos enamorados realmente están de vuelta. Pero, ¿por qué dejarían fotos de su madre? No cuadra. He visto a esos dos idiotas, piensan con la polla y no con el cerebro".
"¿Dónde está la señorita Vasilakis en este momento?"
"En un hotel cercano. No ha salido de la habitación desde que casi nos carbonizamos". Gale miró el reloj y se levantó de la silla en la que había estado sentada. "Me tengo que ir. Hay algo que quiero comprobar".
"¿Te importaría decírmelo?" preguntó Kincaid con una curiosa inflexión en su voz, pero ella ya había pasado rozando al Detective.
"¡No hay tiempo!"
Aproximadamente una hora más tarde, Gale estaba golpeando una puerta de metal para intentar acceder al pequeño edificio frente a ella, pero no tuvo suerte.
Le tomó no menos de cinco minutos notar el candado de tarjeta que colgaba junto a él con un letrero que decía 'SOLO PERSONAL AUTORIZADO'.
Como si eso la hubiera detenido antes.
Metiendo la mano en su bolso, sacó un par de tarjetas de crédito, pero nada funcionó.
Alguien agarrándola por detrás por el hombro la hizo gritar de sorpresa, solo para ver a Jennifer parada allí rascándose la cabeza. "¿Qué demonios estás haciendo?"
"Siendo Gale Weathers. ¿Qué diablos estás haciendo?"
La verdadera Gale Weathers apretó la mandíbula y siseó, luciendo furiosa. "¡Soy Gale Weathers!"
"Así es como lo veo. No tengo casa, ni película, ni arma, y estoy siendo acosada. ¿Por qué alguien quiere matarme? No, porque alguien quiere matarte a ti", balbuceó Jennifer incoherentemente. "Así que, a partir de ahora, voy a donde tú vayas. De esa manera, si alguien quiere matarme, estaré contigo para que no me maten. ¿Tiene sentido?"
