I Have Never Seen Volcanoes

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Era de mañana, Harry estaba despierto mirando como Louis dormía junto a él en su cama, estaba apreciando cada minuto que el pasaba junto con Louis, cuando se casara junto con su hermana ya no tendría esta vista todas las mañanas. Harry seguía mirando a Louis dormir hasta que este sintió una mirada en el.

—¿Me estás viendo dormir?— pregunto Louis tratando de no reír.

—Si— aseguró —No puedo volver a dormir, solo escucho este sonido que resuena por la habitación, y es demasiado fuerte— Harry contesto.

—¿Te refieres a que roncó mucho?— pregunto, ambos rieron por tal comentario y siguieron mirándose el uno al otro.

—Ya no tendré esta vista por que no dormirás aquí— dijo Harry triste pero su mirada seguía en Louis.

—¿Quieras que vuelva al establo con los trabajadores irlandeses? si quieres dormir solo está bien yo puedo dormir ahí— dijo Louis sorprendido, no pensó que Harry querría eso.

—No... me refiero que ya no dormiremos juntos por que te casarás con Audrey— le explicó, lo que menos quería era que Louis pasara menos tiempo con el.

—Aun falta tiempo para eso— dijo Louis sonriendo y estaban en posición para besarse cuando de repente la puerta de la habitación se abrió y Harry se tapó completamente con una sábana para que no lo vieran con Louis así, era su hermana Audrey.

—Buenos días señoritos— saludo su hermana estirándose —No puedo creer que ustedes dos quepan en esa cama tan pequeña— dijo y Louis sonrío mientras Harry seguía haciéndose el que dormía —Harry despierta, tienes que ayudar a papá— le ordeno su hermana quitándole la sábana de encima.

—Nop, es por eso que ahora tenemos un sirviente— dijo sonriendo cuando escucho un grito de su padre proveniente de la cocina haciendo que todos fueran corriendo a ver que era, se encontró a su padre sacando un pan quemado de el horno, el sirviente estaba a un lado de él, era un chico de pelo rubio y ojos azules que parecía un poco mayor que Harry pero de la edad de Louis.

—¡Niall quemaste el pan!— exclamó su padre ahogándose con el humo que este sacaba.

—Lo siento señor, es una tradición de Irlanda quemar el pan para la buena suerte— dijo el, al parecer el nombre del sirviente es Niall.

—Harry ayuda a Niall a poner la mesa— dijo su padre atareado cortando unos vegetales.

—Papá, que parte de "conseguimos a un sirviente" no entendiste— le dijo obvio —La única razón que contratamos a Niall es para que yo no tuviera que hacer labores de la casa— dijo sentándose cómodamente en una silla.

—Su hijo tiene razón señor, yo soy el sirviente y yo me encargo de la comodidad de todos ustedes— dijo tratando de arrebatarle una canasta con el segundo intento de pan recién salido del horno.

—Papá vamos a sentarnos, así te relajas un poco— dijo Harry llevándolo al comedor.

Niall llevo todos los cubiertos y decoraciones de la mesa junto con el desayuno. La madre de Harry estaba leyendo el periódico mientras los demás desayunaban en silencio, Laven le hacía mimos a su gato y solo se escuchaban sus maullidos. Harry estaba algo desesperado para que su madre dejara el periódico y ver si su poema si estaba ahí. Cuando por fin dejo el periódico en la mesa el lo tomo y lo empezó a buscar.

—Oh... al parecer no están las noticias importantes— suspiro decepcionado al no encontrar su poema, pero vio otra cosa que le llamó la atención, iba a haber una conferencia de una de las geólogas más famosas de todo Massachusetts, era la profesora Hitchcock e iba a dar una conferencia de volcanes —No puede ser... ¡Elizabeth Hitchcock dará una conferencia de volcanes esta tarde!— dijo Harry ilusionado.

The Silent Poet [L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora