A brief, but patient illness

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Niall se encontraba haciendo el té para el desayuno de la familia Styles, Edward se encontraba acomodando la mesa junto Laven. Emily se levantó de la mesa dirigiéndose a la cocina donde se encontró con Niall con una bandeja con el desayuno de Harry el cual se encontraba en su habitación demasiado enfermo como para bajar a el desayuno, o al menos eso era lo que su familia pensaba.

—Oh Niall, yo llevaré esto para la habitación de mi hijo— le aviso tratando de quitarle la bandeja de sus manos.

—Señora Styles, no se moleste. Yo puedo llevarlo.

—Dije que yo lo haría— respondió con un tono intimidante en su voz para Niall le hiciera caso. Este no dijo nada y sin quejarse le dio la bandeja a Emily.

Emily se dirigía a la habitación de su hijo y la abrió sin tocar la puerta cosa que acostumbra a hacer. Harry se encontraba recostado en su cama con un trapo húmedo en su cabeza para calmarle la temperatura que tenía, sus ojos estaban casi entrecerrados y tenía una mueca de dolor.

—Mi querido hijo... te traje tu desayuno para que te sientas un poco mejor— dijo y al mismo tiempo poniendo la bandeja en su mesita de noche —También ordene que toda la casa se mantenga en silencio, para ti.

—Gracias madre— decía Harry mientras hacía muecas de dolor.

—¿Te duele mucho la cabeza?— Pregunto tomando su mano.

—Si bastante. Es como si hay un terremoto dentro de mi cabeza— dijo cerrando sus ojos.

—El doctor vendrá a verte en unas horas— dijo acariciando su pelo —Descansa— dijo besando su mejilla.

Harry no dijo nada y solo espero a que su madre saliera de su habitación, una vez que escuchó sus pasos al bajar de el piso de arriba, Harry se levantó de su cama y se fue directamente a su escritorio a escribir otra carta para la misma persona la cual no lo deja dormir por las noches... Louis.

Se la pasó varios minutos escribiéndole cuanto lo extrañaba y diciéndole como se estaba muriendo. Que la enfermedad no lo dejaba en paz ni por un segundo, su presencia le hacía tanta falta que era la enfermedad lo que lo estaba matando.

Una vez que dejo de escribir su carta empezó a buscar entre sus estantes algún libro para leer, pero fue inútil encontrar alguno que Harry ya no haya leído. Así que decidió bajar en un silencio sepulcral para buscar algún otro libro para tener algo de inspiración y seguir escribiendo sus poemas.

Entró a la oficina de su madre y buscó en el librero algún libro que le interesara pero alguien se aclaró la garganta para llamar la atención de Harry, este volteó asustado pero suspiro al ver que solo era una empleada de su madre la cual le ayudaba en su oficina con cosas del trabajo de Emily, la madre de Harry.

—Tu debes ser el hijo de la señora Styles, ¿cierto?— preguntó con una sonrisa encantadora viéndolo a los ojos. Harry se quedó confundido unos segundos al ver que no sabía que se suponía que estaba reposando en su habitación.

—Si— respondió Harry con un tono bastante seco.

—Supongo que eres Laven, el hijo menor. Me presento, soy Bella.

—No... soy Harry— lo corrigió olvidándose de que estaba enfermo.

—¿No deberías estar descansando? escuché que estabas enfermo.

—Oh cierto...— recordó Harry. Hubo un silencio ya que Bella noto que Harry no estaba realmente enfermo —Okey no estoy enfermo, ¡Pero no se lo digas a mi madre! yo solo vengo por un libro...— dijo Harry buscándolo y tomándolo del librero.

The Silent Poet [L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora