The Silent Poet [L.S]

Alone, I cannot be

Ya había pasado una semana desde que Louis decidió dejar a Harry y a su hermana. Harry la pasaba solo la mayoría de su tiempo, en su habitación escribiendo poemas ya que tenía más tiempo para el ahora que Niall ayudaba en las tareas de la casa, no lo hacía todo por que Edward se intervenía en las labores no importa cuantas veces el le decía que lo haría solo. Harry también gastaba otra parte de su tiempo en leyendo debajo de su árbol favorito que su tatarabuela había plantado (No es el mismo árbol donde Louis y Harry pasan el tiempo, ya que su árbol está en medio del bosque donde nadie los encuentre).

En estos momentos Harry se encontraba debajo del árbol leyendo Walden, De Helen Thoreau. Un libro sobre naturaleza que explicaba lo qué aprendió mientras vivía en una cabaña que ella construyó a un lado de donde era un lago en el medio del bosque.

Harry mientras leía sintió como alguien se sentó a un lado de el, volteó y vio a Gina sonriéndole. Harry no estaba de humor así que no le devolvió la sonrisa. No necesitaba ni le agradaba su presencia en estos momentos.

—Gina hazme un favor y vete de aquí por favor. Necesito estar solo.

—¿Que lees?— pregunto ignorándolo completamente, ella sabía que muy en el fondo, el no quería estar solo.

—Walden.

—No sabía que te gustaba, lo empecé a leer. Me aburrió.

—Por favor vete, no deseo de tu compañía en estos momentos— le pidió tratando de contener su paciencia.

—Estas así por Louis, ¿cierto?— pregunto —Wow su amistad es bastante fuerte.

Harry la ignoro y continuo con su lectura. Gina no volvió a decir ni una sola palabra y admiro como Harry leía su libro, pero Harry dejo salir un suspiro bastante profundo y enojado al escuchar a unas personas en su territorio. Volteó a verlas y se encontró con su madre hablando con unos arquitectos, se levantó del piso y fue hacia ella.

—¿Que está pasando madre?— pregunto Harry poniéndose su libro en el pecho.

—Estamos hablando sobre los árboles que cortaremos para que la vía del tren pase por aquí.

—¡¿QUE?!— exclamó bastante molesto —¿Tendrán que cortar mi árbol?

—Probablemente si— le respondió bastante tranquila.

—No pueden cortar mi árbol madre.

La madre de Harry sabía la importancia y el cariño que Harry le tenía a ese árbol. Pero a ella no le importaba, mientras hacía feliz a los ciudadanos de Amherst a ella le bastaba.

Emily ignoro a su hijo así que Harry volvió con Gina frustrado y molesto.

—¿Pasa algo, Harry?

—Cortarán este árbol para que las vías del tren se coloquen aquí— dijo Harry.

—¿No podemos hacer nada al respecto?— preguntó Gina. Harry se quedó pensando unos segundos. Harry recordó que el libro que estaba leyendo hace unos segundos trataba sobre el amor que Helen Thoreau, (la autora del libro) le tenía a el bosque que hizo que fuera a vivir a un lado de este.

—Yo no...— dijo —Pero hay una persona que si— dijo alejándose de Gina, ella al verlo dejarla acelero el paso para alcanzarlo.

—¿Que harás?— pregunto Gina.

—Iré a Concord, Massachusetts. Así podré hablar Helen acerca de mi árbol— explicó —Tal vez por ser hombre la gente no escuché mis llamados, pero a Helen si la escucharan.

—Te acompañó— dijo Gina con una sonrisa.

—No.

—No es seguro que un hombre vaya solo por la ciudad de Amherst, ademas... ¡También quiero ir! Anda di que siiiii— le rogó. Harry rodeó los ojos, en verdad quería ir solo pero ella tenía razón, un hombre saliendo solo por las calles es peligroso.