CAPÍTULO 3 / Cámara fotográfica

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Nunca se me ocurrió pensar
que si bien una palabra suya
podía hacerme tan feliz,
otra me destruiría con igual
facilidad.

—call me by your name.

Pelusa.

Blanca, ojos grandes, largo pelaje, pequeña.

Y con mucha energía.

Maldad, no está en sus características.

—Somos buenos cuidadores, ¿Verdad? —pregunta.

Tiene a pelusa envuelto entre sus brazos. La gata está de lo más cómoda ahí, tiene sus ojitos cerrados, no está dormida.

Asiento con la cabeza.

Hemos llegado del veterinario, no soy fan de los animales pero pelusa en cuestión de horas se ha ganado mi corazón.

¿Y quien no se encariñaria de ella? Si es tan tierna y cariñosa, durante todo el camino se ha portado muy bien, ninguna queja hasta ahora.

Al menos de mi parte.

—Creo que le agradamos. —Menciona.

—Eso parece.

—A mi también me agrada ella.

—Lo se, cuando alguien te agrada no necesitas decirlo porque lo demuestras con tus acciones.

Solo ha pasado unas horas de que conocí a Pelusa y ya le tengo un gran cariño.

Miro entre las compras que hemos traído la appareil photo y la saco de la caja que viene para inspeccionarla.

—Recuerdos —pronuncio.

—Yo solo veo una cámara fotográfica.

—Yo veo recuerdos.

—Tu ves estupideces. Acaso, ¿Estas drogado? —bromea.

Niego sonriente.

—Recuerdos. La appareil photo almacena Recuerdos.

—No. La cámara fotográfica guarda fotos.

—¿Y las fotos que son?

—Que friki eres. —Sonrie.

—Empezaré a tomarme en serio eso.

—¿Qué cosa?

—Lo que piensas de mi.

—No pienso nada.

—Ya.

—En serio, eres como un libro con las páginas en blanco, a partir de ahora tus hojas se llenarán y solo tu decidirás el genero literario sea. —finge su voz.

—¿Ahora eres poeta?

—Siempre lo he sido.

—Claro.

Asiente y dirijo mi mirada a la gatita.

—¿Tienes hambre? —Pregunta.

—No.

—Yo si, quedate aquí y cuídala.

Me pasa a la gatita con tanta delicadeza como si esta estuviera hecha de vidrio y se fuera a romper.

Juego con las huellas suaves de su manita.

Parpadea dos veces seguidas, copio su movimiento y parpadeo dos veces.

En estas horas que hemos pasado con la gatita he notado lo rápido que México que ha encariñado con ella, se nota el aprecio le tiene.

Yo igual le tengo un gran aprecio a pelusa, pero, el la quiere más, lo demuestra.

Estrella Fugaz [CanMex]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora