poliamor ✧ knowmin

capitulo trece

Seungmin estaba destrozado, se le hizo imposible no llorar durante el camino en el taxi y el chofer lo miró con preocupación.

—¿Puedo ayudarle en algo?

Seungmin intentó limpiarse las lágrimas y en un hilo de voz respondió—No se preocupe, estoy bien.

—De acuerdo...

Ya le había avisado a su hermana Chaeyoung que se quedaría unos días en su casa y ella, claro que acepto. Por eso, ya se encontraba esperándolo afuera y cuando llegó, lo primero que hizo es abrazarlo fuertemente.

—Seungminnie, ¿qué sucedió? ¿te peleaste con Minho?

—Es mucho peor—, sollozó en sus brazos—Pero por favor no me preguntes ahora, solo quiero descansar.

—No lo haré—prometió y ambos entraron al interior de la casa.

Seungmin estaba muy triste, solamente quería llorar y llorar. Quería sacar lo que por tanto tiempo había estado guardando, pues ya no podía más. Se acostó en la cama y Chaeyoung no dudo en ir a consolarlo, sabía que Seungmin no quería hablar, así que solo acariciaría suavemente su cabello hasta que se calmara o durmiera, lo que sucediera primero.

—Tranquilo, todo estará bien...

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La intención de Seungmin jamás había sido lastimar a Minho más de lo que ya estaba, simplemente era tan difícil tener que pasar por todo eso. Pero había cometido un error, dejarlo solo aún sabiendo que tenía depresión había sido algo no muy inteligente. Porque Minho no tardó en comenzar con sus pensamientos auto-destructivos hacía su persona.

—Todo es mi culpa—se atormentó a él mismo—Seungmin se fue por mi culpa... él ya no va a regresar... lo sé

Se sentía tan culpable de que su relación estuviese al borde del colapso, de que Seungmin se haya tenido que ir de casa, de que estuviese enfermo, se sentía malditamente culpable de todo. Ya no quería seguir sintiendo así, ni arruinar todo por su «depresión psicótica». Aunque en realidad no había vuelto a ver a Jisung desde aquella vez en el hospital, él ya no estaba físicamente, solo estaba en sus pensamientos, pero justo en el momento cuando Seungmin entró a la habitación, estaba pidiéndole que por favor se vaya ya..

—Jisung yo sé que a ti no te gustaría verme mal, sé que siempre quisiste mi bien, que yo fuese feliz... también sé que ya me hubieses dado una patada en el trasero si supieses en el estado que estoy—rió con tristeza— Por eso te pido, que te vayas de una vez por todas... quiero ser feliz con Seungmin, lo estoy amando como te ame a ti, solo quiero ser feliz y seguir con mi vida... ¿puedes ayudarme?

Eso fue lo que le estaba diciendo, lastima que Seungmin no lo escucho. Además, lo más probable es que ni siquiera le creyera... ahora estaban separados y Minho no podía soportarlo.

Él era fuerte antes de todo eso, pero ahora, con su «depresión» las cosas eran muy difíciles, no podía con tanto, no él solo. Por eso mantenía todas esas patillas juntas en la palma de su mano decidido a terminar con todo de una vez por todas.

Con lágrimas en los ojos y las manos temblorosas, acercó las pastillas a su boca dispuesto a tomarlas todas de golpe, pero no contaba con que alguien lo iba a detener.

—Cariño, no lo hagas... por favor.

Esa voz era irreconocible y le dolió mucho más escucharla. No abrió los ojos, pues sabía que se trataba de sus alucinaciones, pero es qué se oía tan real...

—Mírame , Min—insistió—Estoy aquí, no termines con tu vida.

Minho abrió los ojos y entonces lo vio. A ese precioso peliazul que tanto amo alguna vez, pero también que tantos problemas había traído.

—Jisung...