Capitulo 2: Guardia Nocturna

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Todoroki Shoto era lo que las chicas describían como el hombre perfecto , un chico heredero de una enorme fortuna, con una apariencia por demás atractiva, aun si había una cicatriz en su rostro eso parecia hacerlo aun mas atractivo a los ojos de los demás.

Había crecido como el perfecto hijo menor de Enji Todoroki, que lo había educado desde casa con mano dura desde su niñez y parte de su adolescencia. Tras algunos años logro enfrentar sus rencores y mejorar levemente aquella relación con su padre , al igual que había logrado tener una amena charla con su querida y amada madre.

Adoraba aquella carrera, adoraba su trabajo donde ejercía como un excelente médico que conocía tanto como podía de todo el campo, aun tenia aquella presión que todos ponían de manera invisible sobre sus hombros, debía ser el mejor , aquello solo hacia que sus nervios y estrés estuvieran al tope dia con dia, donde sus superiores le juzgaban con la mirada aun si era el hijo del dueño del hospital donde trabaja, y aun si su padre no le ponía la misma presión que le solía poner de joven, ellos seguían juzgándolo como si tuvieran derecho.

Su mejor amigo Midoriya solía ayudarlo a relajarse un poco con sus charlas ocasionales, aun si eran "competencia" dentro del hospital eso no les impedía llevarse bien. Además de su amigo también estaba Uraraka Ochako, quien era la chica de su pequeño grupo de amigos, aquella castaña trabajaba con ellos como doctora también, aunque ella residía en Pediatría solían juntarse cada tanto a platicar o comer juntos en sus horarios de descanso. De vez en vez decidían llamar al único de su pequeño grupo que faltaba ,un chico de lentes que se dedicaba a atender el negocio familiar.

Sus amigos eran un enorme apoyo en su vida diaria, pese a ser poco sociable, por no decir que apestaba en ese campo sus amigos le comprendían y no dudaban en hacer sus intentos de animarlo.

Su vida estaba llena de presiones, pese a todo no era una mala vida. Disfrutaba de su trabajo donde ayudaba a las personas, vivía solo en un departamento que si bien le parecia enorme y frío era de su agrado de cierto modo, su padre había insistido en regalárselo y tras que su madre le dijera que estaria mas tranquila si viví allí lo aceptó, solía pasar sus días en el hospital haciendo tantas horas extras como su cuerpo le permitía, después dd todo no tenía nada mas que hacer.

Aquella noche había tomado la guardia nocturna del hospital dejando que el de ojos esmeralda se tomara la noche y el siguiente dia para descansar, tras pedirle claro a la castaña que se asegurara de que durmiera, pues ambos vivían juntos para ahorrar gastos.

Se estiro en el pasillo vacío del hospital tallando levemente el puente de su nariz antes de acomodarse él saco y se dirigió a emergencias cuando escucho que necesitaban ayuda allí.

Al llegar había un caos entre los pocos medicos que estaban esa noche y los enfermeros, pues había sucedido un accidente no muy lejos del hospital, lo cual era una suerte para los involucrados pues no tendrían que pasar demasiado tiempo sin la atención medica que seguro requerían. Su mirada fue a dar a una camilla que traían los paramedicos donde habia un chico de apariencia joven de cabellos rubios y tez pálida, esperaba realmente que ese fuera su tono de piel y no que estuviera muy al borde de la muerte.

Lo atendió sin dudarlo verificando que su pulso fuera estable y dando indicaciones a los enfermeros que le ayudaban.

Aquel desastroso encuentro llevaría a Shoto a un experiencia totalmente nueva.

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