Jimin y Jungkook están en el equipo de basquetbol de la escuela.
Jimin es abiertamente gay y los manoseos del equipo en las duchas le encantan.
Jungkook es gay solo y para Jimin, aunque nadie puede saberlo (ni siquiera él mismo) y está en contra d...
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Jimin no pudo evitar sonreír con cierta alegría.
No importaba si habían pasado dos años desde que rompieron, ni que Jimin no había entrado a la misma universidad que él, ni que no habían vuelto a verse en todo este tiempo, por razones del destino no coincidían tiempos ni lugares.
Jungkook nunca le había prestado atención a nadie, Jimin tampoco, aunque el menor solía insistirle al mayor que se divirtiera un poco.
No quería que Jungkook perdiera su libertad, sus oportunidades, esperando a algo que no sabía que iba a pasar.
Había dejado de molestar luego de que una noche, en un bar, Jungkook casi había tenido sexo con una chica, aunque era todo por cierta presión de parte de Jimin.
Jimin quería que consiguiera a otra persona, quizás así tendría razón para dejar de estar tan enamorado de él.
Pero, no habían llegado a desnudarse cuando Jungkook simplemente se fue, dejándole claro a la mujer que estaba incómodo y que él tenía a alguien en su corazón.
—Lo siento, las vaginas no están buenas como recordaba.
Luego, le había contado a Jimin lo ocurrido, y había dicho que él no era algo que se pudiera superar tan fácil. Jimin había llorado por ambas cosas: porque Jungkook tuviera una oportunidad con alguien más, y porque Jungkook aún lo había elegido a él.
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