30 𝙳𝚒𝚊𝚜 𝙶𝚒𝚢𝚞𝚞𝚂𝚑𝚒𝚗𝚘 ᰔᩚɞ

𝓓í𝓪 1: 𝓙𝓾𝓰𝓪𝓻

Shinobu se encontraba caminando hacia la Academia, no sin antes percatarse que su maestro de educación física se encontraba con su espada de madera en el hombro derecho. Era tan recto en las normas de la escuela que, Shinobu no pudo evitar dibujar una sonrisa en si rostro.

Arregló su uniforme quitando cualquier pelusa que tuviera más falda o su chaleco, con la frente en alto ella pasó por su lado.

-Kochou.

Ahí estaba la masculina y ronca voz de su víctima, ella curveo sus labios en una sonrisa y dio media vuelta para ver a su profesor.

-Tomioka-sensei.

-Te he dicho muchas veces del maquillaje, retiralo ahora.

Ella se sorprendió un poco, hasta su sonrisa estaba un poco tensa. Quería seguir con el plan.

-Fu, fu, fu~ Tomioka-sensei, ahora entiendo porque todo el mundo lo odia.

Una ceja empezó a temblar, de verdad empezaba a enojarse y con la hermana menor de su compañera de trabajo.

-A mi nadie me odia Kochou.

-¿Enserio?, éso no es lo que dicen en los pasillos.

Una vena muy marcada en su frente, soltó su espada de madera para sonar su silbato muy fuerte. Llamando la atención de todos en el lugar.

-Kochou Shinobu, a la Oficina del director.

Era la primera vez en su vida que iba a la oficina de Ubuyashiki, solo por jugarle una broma que siempre le hacia cada día. Esta vez, Giyuu se había cansado en todos los sentidos de la descaradez de Shinobu y además, que violara las normas de la escuela.

Era algo que ya no dejaría pasar.

La sonrisa tensa de ella se borró, dejando una vena en su frente un tanto marcada, estaba muy molesta.

-Tomioka-sensei, ¿Enserio no soporta una broma?

-A la Oficina del director, te alcanzó haya.

Le dió la espalda para poder cerrar el portón de la escuela, acaso el chico callado que vivía a su lado y era compañero de trabajo de su hermana le había pasado algo. Pero una cosa era muy segura, ella se acababa de llevar una muy fuerte decepción.

Acomodó sus zapatos cafés para ponerse las zapatillas que eran parte de la escuela, una marca color verde era su distinción de los otros grados, significaba que ella ya estaba en su último año de preparatoria. En primavera estaría empezando la Universidad, para convertirse en una Fármaco Bióloga profesional, como sus padres siempre quisieron lo mejor para sus tres hijas.

Ella no iba a entrar a primera clase, agradecía que fuera la clase de su cuñado Sanemi. Si hubiera sido Iguro estaría muerta.

Caminó por el pasillo del primer piso para poder dirigirse a la puerta que no esperaba ver en lo que le quedaba de ciclo escolar, la Oficina del director.

Dió un ligero golpe en la puerta esperando respuesta.

-Pasé.

Era la tranquilizante y serena voz de su director, aún se veía más enfermó que hace unas semana en la reunión de alumnos.

-Shinobu, ¿Qué sucede?

La aludida se sorprendió de su pregunta.

-Tomioka-sensei me mando a la oficina señor, dijo que venía para acá.

-Es raro, acaba de venir pero, no me mencionó nada que vendrias. Tal vez escuchastes mal, lamentó que hayas perdido tu primera clase por este, mal entendido Shinobu.