Haremos un par de aclaraciones ahora.
¿Yuna y Ryujin consiguieron que el hechizo se rompiera esa misma noche que fueron a reclamar?No, lamentablemente apenas llegaron al lugar, un pequeño cuadernillo apareció y cayó justo sobre las palmas de Yuna, con el frío que hacía, la menor había olvidado llevar sus guantes pero eso era lo de menos, lo verdaderamente preocupante era saber que la bruja Bae Joohyun no estaba en su guarida y que ésta se encontraba hecha trizas.
Cuando Yuna y Ryujin estaban dispuestas a ver más allá de todo el desastre que había en el lugar, escucharon las sirenas de los policías canadienses. El pánico fue lo suficiente como para alertar a sus corazones, los músculos de Yuna captaron la señal de posible amenaza y obligó a la dueña del cuerpo a correr rápidamente del lugar junto al pequeño cuadernillo y una Ryujin colgada a su cuello, la cual estaba siendo sostenida como un bebé para facilitar el no ser vista.
La pelinegra corrió tan rápido como podía, sentía a sus manos congelarse y a Ryujin temblando de frío sobre su pecho, mientras su mano izquierda sostenía el pequeño cuadernillo que comenzaba a brillar repentinamente, revelando las letras de la portada de éste, Yuna lo vio rápidamente pero no se permitió distraerse y continuó escapando.
—Ryu —habló con agitación en su voz y miedo por ser atrapadas, el mono temblaba de frío sobre su pecho pero todavía escuchaba a su amiga atentamente—. Abre mi abrigo y métete ahí, es lo suficiente grande, te mantendrá caliente hasta que lleguemos a casa.
Ryujin no lo pensó dos veces y obedeció a la menor, una vez dentro de su abrigo, se sintió aliviada e incluso proporcionó calidez para que Yuna no se congelara, pues la nieve en Canadá solía ser potente, no estaban en su mejor clima.
(...)
Yuna mandó a Ryujin a bañarse mientras preparaba algo en la cocina, de paso, se tomaría el tiempo suficiente para leer aquél pequeño cuadernillo que había aparecido mágicamente para ella. Estaba segura que era de parte de la bruja Bae Joohyun, pero temía leer el contenido junto con Ryujin y encontrar cosas de las que seguramente se arrepentirían.
Por otro lado, el mono se encontraba dentro del baño, ya lista para intentarlo... se dio cuenta que no podría utilizar su ropa ya que ésta no le quedaba, y cabe aclarar que técnicamente ahora que era un animal ella no estaba utilizando ningún tipo de prenda. Lo único que le quedaba era realizar el baño normal.
Ryujin vio la llave del baño y notó que ésta estaba demasiado alta para ella ahora, así que tomó otra opción, vio la pequeña manguera de la ducha y la sostuvo.
—Creo que será difícil ser un mono.
(...)
Para cuando Ryujin terminó, Yuna estaba frente al sofá y había encendido la chimenea, el ambiente estaba cálido en comparación al clima horrible que hacía afuera.
Habían dos tazas de chocolate caliente con malvaviscos. Ryujin se preguntó si los monos realmente podrían ingerir eso, algo le decía que no. Miró a Yuna y ésta solo miraba el pequeño cuadernillo que ella también había notado desde que cayó en sus manos.
Ver al objeto aparecer mágicamente y caer sobre las manos de Yuna solo le confirmaban que todo estaba unido a algo ridículamente llamado: magia.
Se acercó a la menor con pasos sigilosos pero la pelinegra la vio y le dedicó una sonrisa suave, aunque su mirada mostraba angustia y Ryujin la conocía lo suficiente como para no notarlo.
—Mamá llamó hace un rato, dice que vendrá el fin de semana recién, ya sabes, tiene más trabajo —dijo con despreocupación.
Por si no estaban enterados; Yuna tenía padres técnicamente millonarios, dueños de empresas importantes de Canadá y a pesar de todo, como suele suceder, nunca tenían el tiempo suficiente para su única hija, a lo cual Yuna estaba acostumbrada, para pesar de Ryujin.

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ADOPT A MONKEY! ; Jinlia
FanfictionYuna no para de utilizar stickers de monitos adorables en Whatsapp, las chicas están acostumbradas a esto, pero una de ellas está empezando a encapricharse con la idea de tener uno... -Chicas, quiero que me ayuden a conseguir un monito para cuidar...