Nuestra Ángel |B.A.P|

Capitulo 3.-Nuestra Ángel.

»Bang YongGuk: Noviembre 28, 2014, 6:35 a.m.«

Me desperté gracias a la ayuda de mi alarma, tal vez la costumbre de levantarme temprano ya no se me quite, me levanté de la cama, me dirigí al baño para cepillarme los dientes y la cara, me sequé con una toalla y me dispuse a ordenar mi cama y la sala, con el desastre que dejamos los chicos y yo ayer, pues me dio un poco de pereza arreglar así que lo dejé para hoy, espero que nunca se enteré HimChan que a veces soy perezoso y desordenado. Arreglé la sala, levanté la basura y lavé los trastes sucios, me sentía un poco energético, que extraño, pensé. Pero tal vez sea por la costumbre, ya que normalmente nos levantamos temprano para ir a la sala de ensayos y ensayar el baile y el canto con los chicos.

Cogí ropa deportiva y me coloqué unos tenis Nike color blanco, tomé mis audífonos y mi reproductor de música, tal vez correría algunas vueltas al parque, me alegraba que me queda cerca, agarré las llaves, apagué los focos y me salí del departamento para bajar por el elevador, caminé hasta el parque, estaba todo muy tranquilo y calmado el sitio, normalmente estas horas la gente esta descansando pero también había unas cuantas personas corriendo, trotando, caminando o sacando a pasear a su perro.

Conecté mis audífonos al reproductor y escogí aleatoriamente una canción, primeramente caminé para calentar, luego dí vueltas tras vueltas corriendo en el parque hasta quedar agotado, todo iba bien hasta que me acordé que se me olvidó traer agua, me sentí un poco torpe. Decidí por volver al departamento, fui por primero al estacionamiento, había olvidado mi celular en la camioneta, cuando mi mirada se percata que el carro no se encuentra en su espacio de estacionmiento, me dí un suave golpe en la frente.

-Tonto.-me reclamé.-Se lo prestaste a DaeHyun.-recordé. Le dí la camioneta porque fue el último en irse tarde junto con YoungJae, preferí mil veces darle el carro y no que se fueran solos por la noche.

»Que lindo líder tenemos, ¿Verdad YoungJae?.«

Recordé cuando hizo el raro aegyo de DaeHyun, a lo que le sacó una mirada de desaprobación a YoungJae y a mí una risa.

Entré al elevador para pulsar el botón que me llevaría hasta mi departamento, tarareaba una canción, solo quería darme un buen baño y descansar un rato más, al parar el elevador hasta mi pasillo, empecé a sacar mis llaves de mi bolsillo, al estar enfrente de la puerta de mi departamento era extraño que no tenía seguro, yo recordaba muy bien que le puse llave al establecimiento. Entré enseguida, una mano con un pañuelo lleno de cloroformo me lo colocó entre mi boca y mi nariz, hizo que me desmayara al instante.

Poco a poco empecé abrir los ojos, tenía un dolor punzante en la cabeza, primeramente vi todo borroso y al poco pude notar todo claro, había dos hombres viéndome, rápidamente quería saltar del susto pero me era imposible, estaba atado en una silla, los fuerte nudos me estaban estrujando el cuerpo.

-Buenos días Gukie.-dijo uno de ellos, traía la mitad del rostro izquierdo cubierto con vendas negras.

-¿Quiénes son ustedes?.-pregunté enojado.

-Que hombre tan más rudo.-se burló el otro hombre, que portaba un cinturón lleno de navajas, cuchillos y dos pistolas en cada lado.

-Yo soy Frank y él es HyunHwa.-respondió el hombre con la mitad de la cara cubierta, estos hombres se estaban burlando de mí, se le notaba su risa atravesada.-¿Es él Hyun?.-preguntó, Hwa sacó un papel doblado a la mitad de su bolsillo, era una foto mía al cual lo compararon con mi rostro.

-Sin duda.-respondió.

-Será una lastima matarlo.-comentó Hyun aún con un tono de burla.

-¿Asesinarme? ¿Por qué? Yo he hecho algo malo hacia ustedes.-me defendí.

-Pero me pagaron un buen billete para matarte así que el dinero manda.-contestó Hwa a mis preguntas, ¿quién podría pagar para mandarme a matar? El hombre sacó su pistola apuntándome directo en el corazón.

-Hasta luego Gukie.-se despidió Frank con una sonrisa maliciosa, mientras Hwa cargaba el arma, yo cerré fuertemente los ojos, escuche el estruendoso disparo, que triste forma de acabar con mi vida, ninguna vida merece morir de esta manera, un destello de luz potente empezó a transmitirse aunque tenía los ojos cerrados, ¿ya estoy muerto?, me pregunté a mi mismo. Abrí poco a poco los ojos, no quería ver mi nueva vida. Lo primero que vi fue la bala que se mantenía inerte en el aire, Hwa estaba inmóvil y con la arma en su mano aún apuntándome, Frank mantenía su sonrisa maldita, mirándome como me disparaban pero había algo extraño, parecían inertes, congelados, como si el tiempo se hubiera congelado, una potente luz empezó alumbrar a mi derecha, rápido volteé a ver dónde provenía la curiosa luz, era una chica que tenía colgando en sus manos un antiguo reloj de bolsillo con leontina, el dorado del reloj era destellante, las manecillas no se movían, ¿ella paró el tiempo?, la chica tenía una mirada tranquila y tierna, su pálida piel emitía una suave luz, que me tranquilizaba, sus ojos negros y oscuros, pero me sorprendía lo sorpresivos, grandes y animados ojos que tenía, su vestido blanco, más blanco que el algodón, se mantenía descalza con sus frágiles pies. La chica se acercó a mí, desatándome de la silla al que estaba amarrado, cogió la bala y la desapareció en un instante, con su dedo anular tocó la frente de cada maleante, y como arte de magia los desapareció, el sonido del "Tick Tack" del reloj empezó sonar, las manecillas empezaron a moverse.

La chica volteó a mirarme con ternura y alegría.

-¿Quién eres?......Mejor dime, ¿qué eres?.-pregunté atónito y confundido, ella seguía mirándome con ternura.

-Lo siento por haber llegado tarde.-se acercó a mí, por un momento dí un paso atrás pero su mirada hizo que cambiara de decisión y dejé que se acercara a mí, sus manos empezaron a emitir una luz junto con el reloj, al cual me lo entregó, sin entender y con más confusión, se acercó para entregarme un beso en la mejilla.-Me alegro que estés bien YongGuk.-dijo mi nombre por último para desaparecer.

-¡Oye! ¡Oye!.-grité, pero ya era tarde, esa chica, se había retirado, revolví un poco mi cabeza, quizás estaba imaginándome las cosas pero el delicado reloj que colgaba en mis manos me decía otra cosa. Presioné el pequeño botón que se encontraba a un lado pero no hacía nada, no paraba el tiempo como ella lo hacía. La tapa del reloj tenía algo escrito en ambos lados de la cara, en la cara interior de la tapa se encontraba unas letras, al cual reconocí que están en inglés "SKY", su significado lo sabía, significa cielo, y en la cara exterior se encontraba un grabado, de unas alas. ¿Qué significará?.....