—¿Estas de viaje?— Dylanmolestaba demasiado a veces, estaba claro que por mis historias y todo lo demás, creo que doy a entender que no estoy en mi casa.
Los chicos me habían mirado raro cuando escucharon a Dylan hablar, lo puse en alta voz, odio tener el celular pegado a la oreja.
—Si, ¿pasa algo?
—No pero, cuando sales de viaje me dejas llaves de tu casa para que cuide a Kity— solía hacerlo cuando iba de viaje pero a veces no servía mucho, el vivía en las afueras de la ciudad y esta ves opté por mi vecina, ella era una señora tan buena que podía cuidar mi casa y a mi gatita muy bien.
—No lo hice esta vez, no tuve tiempo, adiós.
—No te hice nada y no es válido que me trates así, ¿hice algo mal?— vaya que había hecho muchas cosas mal.
—Muchas cosas hiciste mal, ¿me dejas colgar? por favor.
—Es que, Ariadna, no te hice nada y ahora te llamo y me contestas enojada— Era claro que iba a estar enojada, desde que le conté sobre Karl salió de mi casa enojado y en una semana ni siquiera se acordó de mi, creo que solo me llama cuando le conviene.
—Déjame, Dylan, adios— colgué bastante molesta, no quería saber nada de él.
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Estaba en el hotel, los chicos ya se habían ido, habíamos pasado un día muy lindo.
Entre a Instagram, lo primero que me apareció fue una publicación de Dylan, había algo raro, no tenía tantos likes, eran fotos bastante buenas, solía tener casi un millón de likes pero esta ves no pasaba de los setecientos mil.
A estas horas estaba jugando minecraft o haciendo tareas, casi siempre estaba jugando, recordé que lo tenía en mi celu así que podía jugar.
Me aburría jugar sola a si que subí una historia preguntando que quien se ofrecía a jugar minecraft conmigo.
Me quede confundida y concentrada pensando, hasta que el mensaje de Karl me distrajo, había respondido a una historia.
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