Fantástica de los fanfics (Amanene)

Capítulo 9

Nene tras notar esto con mucho cuidado movió a Amane para que se apoyara en su hombro y siguiera durmiendo, a ella le pareció muy lindo ver a Yugi dormido en su hombro de esa forma, como le hubiera gustado sacarle una foto, era extraño que Amane mostrara una feceta como esa 

–Yugi –Susurró ella cuando la película terminó a eso de las 3:18, ya todos se estaban yendo –Yugi, debemos irnos –Lo movió un poco, este refuñó tiernamente y siguió durmiendo, ahora si que Yashiro quería tomarle una foto –Disculpe, señorita –Le habló a una joven que pasaba por ahí dispuesta a salir de la sala, esta la miró esperando a que hablara –¿Podría tomarnos una foto? Por favor –Consultó sacando su teléfono para poner la cámara y extenderselo a la joven

–Claro –Ella tomó el teléfono y le sacó un par de fotos a lo Nene agradeció correctamente, la señorita se despidió y se fue no sin antes devolver el teléfono

–¡Yugi! –Exclamó cuando la señorita se alejó, el mencionado se despertó de golpe –Ya debemos irnos, la película terminó

–Ah si, perdón –Carraspeó la garganta avergonzado por haberse dormido, se estiró y finalmente se levantó extendiendo su mano hacia la chica –¿Vamos?

–Si –Ella tomó su mano para levantarse y así ambos salieron de la sala sin soltarse en ningún momento –¿Dormiste bien? –Preguntó cuando estuvieron fuera, él se sonrojó ante la pregunta

–Lamento haberme dormido

–No no, no era para ofenderte, realmente quiero saber si dormiste bien, esta mañana parecías algo cansado –Amane lavantó la mirada sonriendo leve ante la preocupación de la chica por él

–Si, dormí bien, gracias –Ella asintió

–Me alegra –Yashiro miró en dirección al baño –Iré al baño, espérame aquí ¿Si? –Él asintió por lo que ella se soltó del agarre y se fue en dirección al baño

En eso Amane notó que en la barra del cine estaban vendiendo pequeños recuerdos de la nueva película de la saga "Hamsters Espaciales"

–A Yashiro le gustan esas cosas –Pensó y sin rechistar se dirigió hasta allá para comprar dos de estos, creyó que se vería lindo que ambos llevaran esos llaveros a juego –Gracias –Dijo al vendedor que le entregó ambos accesorios, estaba por volver a donde estaba esperando a Yashiro cuando dos chicas se le acercaron tímidamente, parecían tener la misma edad que él

–Hola, mi amiga y yo te vimos y realmente nos pareciste muy lindo –Habló una de ellas, él solo sonrió nervioso y levemente sonrojado ante el cumplido

–Ah, gracias

–Y nos preguntábamos si nos podías dar tu número –La otra extendió su teléfono queriendo que él le dejara su número, nunca le habían pedido algo así, esto lo puso nervioso

–A-ah, bueno... Verán, yo...

–¿Yugi? –Escuchó a Yashiro preguntar entre la gente, él miró en todas direcciones buscándola

–¡Yashiro! –Exclamó al verla, la chica volteó a verlo en cuanto lo escuchó, él miró a las chicas frente a él –Lo siento, ya tengo a alguien –Y se fue con la de pelo plateado antes de que las chicas pudieran responder

–¿Qué hacías? –Interrogó ella

–Nada, sólo vamos –Tomó su mano rápidamente y salieron de allí, Nene lo siguió un poco dudosa, pero no dijo nada –Ya son más de las 3, ¿Qué quieres almorzar?

–No lo sé ¿Tú que quieres comer?

–No lo sé –Ambos caminaron pensando en que almorzar sin notar que seguían tomados de la mano –¿Quieres ramen? –Preguntó tras un rato de caminata

–Claro, suena bien –Cambiaron de ruta y se dirigieron en dirección contraria de hacia donde iban, había un restaurante de ramen muy bueno cerca de allí

–Buenas tardes –Saludó el tendedero cuando ambos entraron

–Buenas tardes –Saludaron de vuelta sentándose uno junto a otro en la pequeña barra que había ahí, solo entonces se soltaron las manos

–¿Qué les sirvo?

–Yo quiero... –Nene miró un poco los tableros colgados a la pared con las distintas opciones –Ramen de hueso de cerdo con salsa de soja, con el caldo ligero, por favor

–Yo quiero lo mismo que ella –Habló Amane, el señor asintió y se puso manos a la obra

–Esta vez yo pagaré, tu ya pagaste el desayuno

–Tú pagaste las palomitas, me toca pagar

–Pero tu pagaste las entradas y el mochi que me diste en la mañana

–Bien, la próxima vez yo pagaré

–Suena justo, trato hecho

–Aquí esta su pedido –Dijo el hombre poniendo ambos platos frente a cada uno –Corre por la casa

–¡Muchas gracias señor! –Exclamaron al oír lo último mientras miraban gustosos el plato frente a ellos

–Para la joven pareja –Amane se puso colorado al instante, Nene quedó algo desconcertada ante ello ¿Parecían una pareja?

–Gracias, señor –Dijo avergonzado el chico tomando los palillos –Gracias por la comida –Y sin empezó a comer algo avergonzado

–Gracias por la comida –Habló Yashiro agarrando los palillos para empezar a comer, ambos comieron en un silencio sepulcral, el comentario del tendedero había puesto algo incomodo el ambiente entre ambos ¿De verdad parecían una pareja? ¿Fue porque llegaron agarrados de la mano? Los amigos tambien se agarran de las manos ¿No? ¿Fue porque discutieron sobre quién pagaría la cuenta? Los amigos también hacen eso... momento... ¡¿Habían llegado agarrados de la mano?!

Este último pensamiento hizo que Yugi se atragantara con los fideos que tenía en la boca, tosió estruendosamente ante lo cúal Yashiro atinó a darle palmadas en la espalda tratando de que se calmara, el señor amablemente le extendió un vaso con agua el cual Yugi se bebió rapidamente logrando pasar los fideos  y respirar nuevamente

–¿Estas bien? –Preguntó Yashiro preocupada

–Si, solo... recordé algo, lo siento –Extendió el vaso al hombre –Gracias por el agua, lamento mucho el escándalo

–No, esta bien niño, no pasa nada –Contestó recibiendo el vaso

–¿Estas mejor? –Yashiro preguntó preocupada

–Si, estoy mejor, perdón por preocuparte, Yashiro –Ella posó su mano en la espalda y la acarició un poco

–¿Qué recordaste para haberte atragantado así?

–No, es que... olvidé hacer mi tarea de... física

–Oh, cuando vuelva a casa te enviaré las respuestas ¿Si?

–No, no es necesario, la materia es fácil, solamente son espejos convexos y eso

–Pero Yugi, dejaron de pasar esa materia el año pasado

–Ah... –Yashiro rió leve ante la reacción desconcertada de Amane

–Esta bien, si no quieres decirme lo entiendo

–Ah, claro... –Continuó comiendo en silencio acción que Yashiro imitó, ambos terminaron de comer en silencio pues ya no sabían de qué hablar