— Mi señor, hemos vigilado al humano como se nos ordenó. Hemos descubierto que hay otros como nosotros, vigilándolo también. —Una sombra uniforme, informó a su líder.
La persona detrás de aquella silla de caoba negra, frunció su entrecejo.
¿Alguien más tenía sus ojos sobre su presa?
No, eso si que no lo iba a permitir.
— Desaste de ellos, y busca a la cabeza tras ellos. —Ordeno.
— Si, mi señor. —La sombra despareció.
YoonGi se levantó de la silla, viendo el enorme ventanal frente él, una hermosa luna plateada adornaba el cielo, cerca de ella habían tres estrellas brillando, formando un triángulo. Solaris, dentro de poco abría un eclipse.
— Nadie, absolutamente nadie se mete con lo que es mío. —Una sonrisa oscura se mostró en su boca, sus ojos cambiaron y su apariencia antes bella, tuvo una transformación abrupta.
No era humano pero tampoco era cien por ciento bestia, tenía esa apariencia entre ambos mundos. El castigo a pagar por cruzar a un mundo donde su raza no debería mostrarse.
Era un demonio, un señor demonio no completo pero tenía sus poderes, su aura y su fuerza sobrehumana.
JiMin observó su entorno, aunque sus ojos de día veían normal, si habían demonios o fantasmas cercas él podría verlos, transparentes, pero los vería.
Bostezando entro en el local donde tenía que grabar una escena para un comercial, donde participaban varios otros artistas.
Varios pares de ojos se posaron sobre su persona, JiMin se sintio un poco cohibido, bajo su mirada y luego jugueteo con sus dedos, un par de zapatos cafés fue lo que vieron sus ojos, luego de unos minutos viendo al suelo.
— Nunca bajes la mirada JiMin-ssi, no te dejes intimidar por nadie. —Aquella voz sonó tan cerca de sus oídos que instantáneamente se tiñeron de rojo.
— YoonGi Sumbae-nim. —Saludo, alzando la mirada para ver a su dios masculino, quien le sonreía.
¡Tan genial! YoonGi era tan increíblemente guapo, un Adonis.
JiMin se avergonzó de sus pensamientos. Temiendo reflejar sus pensamientos en su mirada, esquivo los profundos y oscuros ojos del mayor.
YoonGi soltó una risita baja, llevo una de sus manos hacía sus cabellos dorados, devolviéndolos. Era como acariciar la cabeza de un pequeño cachorro de pomeraniam. Tan adictivo.
Los demás actores observaron aquella interacción con envidia. Ellos también querían interactuar con ese muslo dorado de la pantalla grande.
YoonGi pudo leer sus pensamientos con solo ver esos ojos llenos de envidia. Los humanos eran tan repugnantes, cuando su corazón era negro como la tinta.
Tan repulsivo, que no pudo evitar tragar grueso, y querer comer un poco de sus carnes. Tan hambriento.
JiMin ajeno a todo lo que su hyung pensaba, sonrió tiernamente y floto sobre nubes, deseando que ese momento nunca acabará. Era tan cómodo.
Hi, a donde sin votar y comentar?Os ha gustado ¿?
Grafías x todo el apoyo que le brindan a esta fanfic!!
Estamos a la mitad del final UwU^^ No se olviden de pasar a leer mis demás historias:
Rojos, cómo lo sangre.
Demonio y Emperador.Las TQM💜
MinMin💚
ESTÁS LEYENDO
Lord Demond ; ©Yoonmin
Mystery / Thriller¿Qué te asecha en la oscuridad? ¿Qué esconden las sombras? JiMin es un joven actor de tercera categoría, YoonGi es el Emperador de la pantalla grande, pero también es... -Yoonmin -Fantasía × sobrenatural ©®100% original. No copias/No plagio. Portada...