Prolongo

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El cosquilleo de mis dedos pronto me hacen darme cuanta que aun estoy vivo, mis parpados tiemblan en busca de luz, con un poco de esfuerzo logro abrirlos de apoco, el primer rayó de luz golpea mi cara y me ciega momentáneamente, mi pupila se contrae ante la excesiva muestra de luz y suelto un gruñido.

Después de esos efímeros segundos empiezo a sentir mas mi cuerpo, el aturdimiento de mi cabeza por el fuerte impacto y el pitido en mis oídos como si una explosión hubiera detonado. Trato de reincorporarme pero suelto un quejido, el intenso dolor azota mi cuerpo haciendo que hasta la mas mínima célula y musculo se contraigan, como si eso no fuera suficiente, la sed se hace presente, mi garganta quema por la falta de evidente agua, ¿Dónde estoy? las dudas empiezan a asaltar mi mente y con ello se intensifica el dolor.

Mis cuerdas vocales se tensan al igual que mi mandíbula tratando de retener el grito que se atora en mi garganta.

Mi cara me duele horrores, mi ojo izquierdo arde.

Trato de volver a reincorporarme haciendo un sobre esfuerzo, esta vez parezco tener éxito, busco ponerme de pie apoyándome en las palmas de mis manos para buscar estabilidad, la visibilidad de mi único ojo derecho busca la respuesta de mi origen hasta que se detiene en el cuerpo de una persona, esa persona era Yoo Gwi-Nam, "ugh esa alimaña" pensé, estaba manchado de cenizas boca arriba, su ropa hecha tirones y sin utilidad, se veía del asco.

—¿Pero como llegamos aquí?—Ante mi duda, mi cabeza pulso, me lleve una mano tratando de amortiguar el dolor; fragmentos de recuerdos se mostraban a miles de segundos, cada uno de ellos detrás de otros. el como la escuela se vio infestada de lo que parecen ser zombies, como nos escondíamos en los salones en busca de protección, cuando pelee con Gwi-Nam por el teléfono, el como cayo en la mesas para ser brutalmente "mordisqueado" despegue levemente mi mano de mi cabeza ante la leve pero impactante confusión

—Carajo —murmure por lo bajo redirigiendo mi vista hasta donde su cuerpo quizás inerte descansaba sobre el túmulo de muertos cruelmente calcinados.

Mire a mi alrededor en busca de indicios de alguien mas, pero al parecer somos los únicos aquí a demás de los cadáveres en putrefacción, dudando en si avanzar o no, me arme de valor y di el primer paso en su dirección cuidando de no tropezar entre tanto muerto, la distancia entre el y yo no era mucha de tan solo dos metros y medio mas o menos le calculo.

Estábamos al parecer en un cuarto, por lo visto lleno de cenizas.

Mordí mi labio inferior con nerviosismo, a decir verdad; mi cuerpo duele de pies a cabeza, pero por extraño que parezca se siente como si no fuera reciente, el hormigueo en mi cuerpo me confirma mi teoría, con una mano en la pared buscando darme dirección, alce la vista al frente y pude ver que todo el edificio se encontraba en cenizas, donde sea que vieras estaba negro, el gris sustituido por el fuerte azabache, y el olor a quemado estaba en el aire envuelto con el olor de putrefacción proveniente de los muertos, ahogue una arcada al mismo tiempo que llegaba asta Gwi-Nam, lo medite de nueva cuenta ¿No podría dejarlo aquí? después de todo, ¡¡por su culpa carezco de ojo izquierdo!! gruñí ante mis pensamientos, Respira y contemos hacia atrás; tres me puse de cuclillas a su lado, dos quite unos brazos de enésima suyo pertenecientes a los anteriores trabajadores del lugar ¡¡UNO!! con fuerza lo agarre por debajo de las axilas buscando sacarlo de entre todo los demás pesos, —Diablos Gwi Nam, ¡¡Pesas!!— hale de el con todas mis fuerzas, con el primer tirón logre sacarlo un poco de ahí, con el segundo y tercero la mitad del cuerpo ya estaba fuera, volví a tomar agarre -Vamos Cheong san ¡¡Ya falta poco!!- mire a su dirección y solo las piernas hacia falta por salir, celebre mentalmente, no es por ser malo y ni que tenga poco aguante o fuerza, pero realmente pesa.

—¡Ya casi!—hice fuerzas.

—¡Solo las piernas!— volví a halar esta vez usando mi peso y como supuse logre sacarlo de ahí —¡Listo!

Pero el peso de el sobre el mío me desestabilizo llevándome con todo y su cuerpo hacia atrás, cayendo en el duro y frio suelo, solté un grito de sorpresa, llevando por inercia mis manos al frente intermedio de nosotros dos buscando distancia y que su peso no me aplaste por completo

—¡Quítate de encima animal, pesas!

Grite, cuando logre sacarlo de encima, me pare al igual que sacudí mis manos en mis pantalones quitando la mezcla de tierra, polvo y cenizas.

Bien

—¿Y ahora que?— pase una mano sobre mi cabello en busca de calmar mi ansiedad.

—¿Qué hora será?— Con mi vista busque una fuente natural de luz que resolviera mi duda, quizás fui escuchado por que no muy lejos de mi se encontraba el hueco en donde se supe debe ir una ventana.

La luz natural prominente del cielo se encontraba en colores ligeramente naranjados acompañados de rojizos, claro atardecer y próximo anochecer.

—Supongo que hay que buscar un lugar donde dormir— Mire de nuevo hacia el cuerpo tirado de Gwi-Nam
—¿No dirás nada?— Con la punta de mi pie empuje ligeramente su cara en busca de reacción o una mínima respuesta, pero ni se inmutó.

—Eso es un claro no— Hice una mueca en disconformidad.

"Estamos muertos" Cheong x Gwi-Nam "Entre odio y amor"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora