"Estamos muertos" Cheong x Gwi-Nam "Entre odio y amor"

Capitulo 2

"Pero mientras recordaba un sonido me despertó de mis recuerdos, más bien un quejido, voltee la cabeza hasta Gwi-nam.

El.

El había despertado".

... ...

En ese momento no sabia que pensar o hacer, me encontraba congelado.

No había pensado en "este momento" cuando decidí quedarme.

Podía verlo reincorporarse de apoco, parecía desorientado, una de sus manos posicionada sobre su cabeza probablemente por el punzante dolor de la caída, su mirada viajaba de vez en cuando de un lado al otro, seguramente buscando respuestas de su paradero.

Parpadeé un par de veces tratando de volver en mi para posteriormente alcanzar la mochila negra buscando una botella de agua al igual que un paracetamol para aliviar su dolor de cabeza, el se dio cuenta de mi presencia poco después debido al ruido del cierre al abrir, Su mirada ónix cayo en mi para eventualmente fruncir el ceño en desconfianza.

Se sentía cierta tención en el aire.

Pare de hurgar en la mochila, había logrado encontrar las pastillas y la botella, así que trate de aligerar el habiente entablando una conversación.

Fije mi mirada en el, el cual mantenía su mirada hacia abajo, en completo silencio.

-Me alegra que hayas despertado, ¿Cómo te encuentras Gwi-Nam?.

No hubo respuesta, me relambi los labios con nerviosismo.

-¿Sabes? A sido un poco difícil mantenerte hidratado -Me acerqué con la tableta de pastillas y el agua en mano buscando su mirada.

No lograba topar con ella, la mantenía fija en el piso, como si las duras mantas de la camilla fueran lo mas entretenido del mundo, su flequillo ligeramente largo le tapaba su único ojo, me acerque un poco mas extendiendo el agua junto a las pastillas en su dirección, cuando por fin alzo su mirada y choco con la mía, un escalofrió me recorrió de pies a cabeza, su penetrante mirada tan profunda y gélida como la noche lo único que transmitía era rencor, rencor que dirigía hacia mi, sentía que sus ojos me perforarían en cualquier instante.

Con incomodidad pase saliva por la tráquea, mi laringe tanteándose por el movimiento al tragar y la tención de la dermis por los nervios, tratando de apartar la mirada de su insistente mirada rencorosa mientras buscaba un nuevo tema de conversación, cuando creí tener un nuevo tema del cual hablar en la punta de mi lengua, el por fin hablo.

-¿Cómo carajos sigues con vida?- Apenas en un murmullo audible pero brusco hablo, su voz ronca y desgastada por los días en sueño.

Descolocado por su pregunta, pregunte.

-¿Cómo dijiste -Pero su mano en mi garganta interrumpió por completo mi frase, me sorprendió su repentino acto.

El impacto de la fuerza de su peso con el mío al chocar mi espalda con la fría y dura pared me dejaron por completos adoloridos y sin aire en los pulmones, su agarre al rededor de mi cuello apretaba cada momento mas, sin posibilidades de abastecerme de oxigeno, privándome casi por completo de el.

De un movimiento brusco acerco su cara a la mía, mis manos alrededor de su agarre peleando y pataleando por que me deje libre, a lo cual, el no accedía.

Y con violencia volvió a hablar, esta vez gritando.

-¡¿Por que aun no te has convertido?!- pregunto con un gruñido gutural.

Privado de la capacidad de respirar, lo único que salía de mi eran quejidos a forma de respuesta, el al darse cuenta aflojo su agarre levemente pero lo suficiente para que entrara un poco de aire y respondiera.