—... Espera un segundo... —Dijo Yuzu cortando el beso repentinamente—... Hagamos una pausa.Mei abrió los ojos muy despacio, sorprendida por el tono de voz serio.
Al inicio no entendió el porqué de pronto la rubia parecía estar dudando de sus acciones.
Carecía de total sentido teniendo en cuenta la conexión emocional que ambas habían logrado.No quería pensar lo peor, pero conforme fueron pasando los segundos y consideró interiormente en cual podría ser la razón de que se detuviera, Mei sintió una dolorosa punzada de miedo y los típicos sentimientos de inseguridad instalarse dentro de su pecho.
Lo último que quería la pelinegra en ese punto, era que después de haberse sincerado por fin; Yuzu de repente decidiera echarse para atrás y le dijera fríamente que aquello entre las dos no era más un error.
Por supuesto estaba exagerando en esas rebuscadas suposiciones.
Todo iba bien entre las dos y estaba encaminado en la dirección correcta.
¿Entonces porqué pensaba lo contrario?
¿Porqué dejaba que esos pensamientos que extrañamente sonaban justo como Amamiya se interpusieran en su cabeza?Ella sabía con certeza que la conversación que ambas tuvieron sólo minutos atrás había dejado claro cuál era la verdad sobre sus verdaderos sentimientos, así que conforme fueron pasando los segundos, Mei se obligó a dejar a un lado sus preocupaciones mal infundadas, se repitió una y otra vez en la mente que todo estaba bien, y ya con la cabeza más despejada comprendió realmente cuál era la razón de que Yuzu decidiera detenerse.
La conocía lo suficiente como para saber que se trataba de algo tan sencillo como natural: ya que sobre sus mejillas había un nuevo rastro de lágrimas que tercamente se negaban a dejar de aparecer y Yuzu creía que eran debido a ella y a sus caricias.
Decidida y algo avergonzada por dejarse llevar por sus miedos más absurdos; Mei rápidamente secó esas lágrimas con su mano, respiró profundo para calmarse y después negó rotundamente con la cabeza, dándole a entender a Yuzu que si de algo estaba segura en ese momento, era que todo estaba más que bien.
—No te detengas por favor.
—Lo siento... —Yuzu esbozó una pequeña sonrisa de disculpa—... Es que odio verte llorar... No puedo evitar pensar que quizás estoy siendo insensible... ¿Estoy yendo muy rápido?
—Para nada —Le aseguró Mei con firmeza—. Y sé que no te gusta verme vulnerable, estoy consciente de eso, pero ya sabes que no todas las lágrimas son malas. Puedo asegurarte que estas no lo son.
—¿Segura? -Los ojos verdes parecían un poco tímidos—... Porque no me malinterpretes; esta visión de tenerte prácticamente semidesnuda frente a mí es sin duda una de las mejores cosas que me han pasado en la vida, pero si con todo lo que ha pasado; sientes que me estoy sobrepasando y eso te hace sentir incómoda, sólo tienes que decirlo.
No voy a enojarme.—No me incomodas —Mei no pudo evitar reír pues la ternura y las ocurrencias de Yuzu nunca dejaban de sorprenderla—... Te acabo de decir hace solo unos minutos atrás que te amo.
Está más que implícito que quiero que me toques...—¿De verdad? —Yuzu le sonrió entre avergonzada y halagada.
—De verdad —Las mejillas de Mei se tornaron de un tenue color rojo—... Si me ves llorando es que tantas emociones juntas me tienen un poquito abrumada... Pero fuera de eso te aseguro que estoy bien.
Nunca me sentí más feliz y a salvo como en este momento.—Mei...
—Es la verdad —Continuó—. He vivido con tanto miedo...
Ahora de alguna forma estamos las dos aquí contra todas las posibilidades, y sé que estos sentimientos con los que cargué por tantos años finalmente son correspondidos, y yo... Simplemente ya no quiero dar vuelta atrás.
¿Tiene sentido para ti?
Digo, porque de verdad, ya no quisiera contenerme... Estar contigo es algo que quiero hacer.
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Citrus One-shots
FanfictionCualquier cosita que se me ocurra (ノ◕ヮ◕)ノ*.✧ Créditos a Sabu-sensei quién es la creadora de estos bellos personajes ❤️🤗