Lamento a las 11 de la noche

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Estoy acostado, mi cuarto tan frío y helado, estoy acostado, pero sigo pensando.

Mis padres están durmiendo y yo sigo exponiendo mis miedos ante la inmensa oscuridad que alberga mi habitación, me aterra y siempre se aferra.

Mi conciencia me pesa por un crimen de cuando tenía 13,lastimarla fue el inicio de mi final, ella talvez lo olvido, pero para alguien como yo, eso es mejor que cualquier don.

No me arrepiento de nada, estoy bien con todo, y si hiciera algo malo dormiría como un recién nacido, pero por ser un maldito me he quedado ido.

Hace cuatro o cinco años de no pegar un ojo,de quedarme desvelado y pareciera que estoy ciego como topo, no veo nada más que mi arrepentimiento y a mi mismo me menosprecio.

En mi cama sigo acostado, con un pensamiento en la mano, por mi mente a frecuentado, es el pensamiento de dejar todo de lado.

Mis padres están durmiendo, son las 11 de la noche y yo sigo escribiendo, parece más una confesión, pero debería de ser un perdón.

Hace cuatro o tres años que no hago algo realmente malo, talvez a algunas personas he lastimado, pero eso solo ha sido por ser un maldito que aún sueña con cosas de niños.

Me veo al espejo y me tiró veneno, no tengo peor enemigo que el rencor hacia mi propio yo.

Cada día que pasa me digo que me debo de esforzar, pero al parecer me da igual y hago lo que esta mal, sentarme a esperar que la vida pase para arrepentirme por toda una eternidad.

Lo peor no es mi dolor, sino el que cause yo, me he creado todo un show, mi verdad ha desaparecido y solo quedo yo.

Ella debe de estar durmiendo mientras aquí yo sigo despierto, me arrepiento, me lamento y al cielo ruego, que ojalá todo cambie con el tiempo.

EdwinCortes

Poesía De Un Chico Muy Normal Donde viven las historias. Descúbrelo ahora