Capítulo 4

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En los pasillos se topo con Minho el cual le regaló una sonrisa y posó su brazo sobre los hombros del rubio lo cual no lo molestó ya que este solía ser cariñoso con todos, Felix debía de admitir que entre todos Minho era el más cercano al rubio
-¿Estas bien Yongboki?, decía este luego de ingresar a la clase y sentarse en sus respectivos lugares ignorando por completo al de pelo negro que se encontraba escuchando música.

-Claro que si Minho, no te preocupes jeje, por cierto ¿hiciste la tarea de Biología?, este último negó asustado ya que siempre se olvidaba de sus tareas e iba muy mal en biología podría repetir.

-Toma, decía el rubio sacando su cuadernos hermosamente adornado de biología -Puedes copiar de la mía.

-Eres un sol, te besaría pero estamos en clases, aunque eso no sería un pro...

-¿Podrían callarse?, los dos Lee voltearon a mirar al alto el cual los miraba enojado fulminado con la mirada al Lee mayor -No entiendo porque aceptas el cuaderno de este tonto si ni quiera sabe nada, apuesto que todas sus tareas está mal, es un tonto que me es raro que sepa aunque sea escribir, dale su tonto cuaderno y toma el mio.

-¿¿Hyunjin, que mierda te pasa, porque mierda tratas así a Yongboki??, decía ya irritado Lee mayor por el comportamiento del pelinegro hacia el rubio. Este solo lo ignoró estirando el cuaderno del rubio pero fue en vano ya que el Lee mayor tomaba fuertemente el cuaderno, el rubio al ver la escena y siendo nuevamente humillado tomo rápido el cuaderno y lo puso sobre su mesa.

-Minho, Él tiene razón, yo soy un tonto y se nota por como soy en clases, Hyunjin es más inteligente así que tona el suyo, mis tareas seguro están todas mal y podría perjudicarte, ya sabes soy el tonto, decía con una sonrisa triste tomando su cuaderno y borrando todo lo que había hecho, siendo observado por el pelinegro el cuál vio de reojo y notó que se equivoco estaba todo bien así que tomó el cuaderno.

-Dame eso, debo de corregirlo, decía el rubio desanimado.

-Deja de ser tonto y deja de hacer estupideces, no borres nada

-Por favor dámelo, decia Felix con ojos un poco llorosos -Los cambiaré porque de seguro están mal y necesito pasar esta materia, el pelinegro miró y sin pensarlo tomó el cuaderno y la tiró al suelo, haciendo que el rubio la recoja se sintió mal al ver como el rubio agachaba la cabeza luego al levantarla tenía las mejillas mojadas, solo se sentó y no dijo nada.

En toda la clase el rubio estuvo con la cabeza baja hasta que se canso de llorar y recostó su cabeza en el pupitre quedando así dormido, Minho fulminaba con la mirada al alto.

-Eres un gran Idiota.

-...

-Espero que Felix encuentre pronto a alguien que lo aleje de ti y quite ese tonto amor que siente por ti, no mereces ni una mísera de su amor, él merece alguien mejor, alguien como

-¿Alguien como tú no?, pues sigue soñando, Felix estará enamorado de mi siempre así que no tengo miedo de nada y me importa poco, asique deja tus tontos sermones, mejor vete a hacer algo más provechoso.

-No me quedaré aquí dejándote con Lixie.

-No le haré nada, no me interesa, vete, decía enojado el alto el castaño miró por última vez al rubio y se alejó de ahí.

Cuando todos al final se fueron el pelinegro tomó un paquete el cual tenia especialmente guardado para el rubio y lo dejó cerca de su rostro, sin poder evitarlo se acercó a su hermoso rostro admirando cada facción del rubio, mientras arrepentido decía un bajo "lo siento" retirándose de ese lugar.

Felix después de despertarse notó que ya no había nadie asique rápido se levantó y tomó todas sus cosas pero un pequeño paquete en su escritorio llamó su atención al abrirlo notó una caja de bombones el cual era su favorita acompañado de su sofá favorita también, con un "lo siento " grabado en un papel, ese se sorprendió y en la primera persona que pensó fue en Minho-Hyung seguro fue él, asique pensó que se lo agradecería mañana con unos brownes especiales.

-Papá Win ya llegue, decía el rubio mientras colocaba sus zapatos en su lugar siendo recibido por su tío tío cual sonriendo de manera tierna se acercó a su sobrino dandole un cálido abrazo y rápidamente jalando hacia el sofá.

-Ahora cuéntame todo sobre tus nuevos amigos, decía este con los ojos brillos,, Felix de manera Felix comentó todo lo que le ocurrió hoy con sus nuevos amigos recibiendo la atenta mirada de su tío el cual estaba demasiado feliz ya que al fin su bebé estaba siendo más sociable y hacia amigos, años al psicólogo funcionaron al fin y como con su sobrino el sintió también el mismo aprecio hacia los chicos.

-Más adelante deberías de invitarlos a comer aquí, siempre hay mucha comida y solo somos dos, decía su tío haciendo un puchero y si Felix copio casi todos los gestos y el carácter de su tio el cual le decía papá ya que era el único que en verdad parecía su padre.

-Por cierto mi bebé, te hice tarta de manzana tus favoritos asique ve a lavarte las manos y rápido ven a comer, Felix se levantó y rápido hizo lo que su tío le dijo.

Luego de terminar de comer y limpiar todo Felix tomó una rebanada grande de la tarta y la colocó en un tapper revisando la hora se fijó que a esta hora Hyunjin sale con su perrito a jugar en el patio del frente así que salio después de arreglarse un poco para así darle a su príncipe la tarta, al salir vio con una sonrisa que tenía razón, ahí estaba el hombre de sus sueños con su futuro hijo.

-Principe.

-Que quieres Lee, decía el alto de manera fría, pero el rubio solo mostró una hermosa sonrisa.

- Te traje tarta de manzana, papá lo hizo y por eso te lo traje.

-No me gusta la tarta de manzana.

-Mientes siempre comes en la cafetería cuando hay, me di cuenta que son tus favoritas.

-Vaya... eres un buen acosador, das miedo

El rubio río fuerte ya que sabia que fue un poco sarcástico y eso le dió risa, Hyunjin fuera de la escuela era un poco más hablador y menos enojon era distinto

-Dejalo en la entrada y veré después si lo llevo o no, eso hizo el rubio luego sentándose en los escalones observando al rubio jugar con su perro y viéndolo sonreír, esa era su parte favorita cuando era él mismo y sonreía y se divertí.

-¿Ya te dije que eres el ser más hermoso que he conocido?, él alto se detuvo un rato un mirando al rubio negó siendo un poco tímido.

-Pues debería de decírtelo cada día, ya que sería un desperdicio no admirar tremenda belleza irreal, decía el rubio mientras juntaba sus rodillas y ponía ambos brazos encima de estos colocando su mentón encima de los brazos mirando a los ojos del pelinegro el cual también hacia contacto con él, nada los interrumpía, ambos solo compartiendo la mirada indescifrable para el otro pero íntimo.

Duraron 5 minutos así luego separaron sus miradas al escuchar a su tío llamarlo lo cual hizo que el rubio rápidamente levantara y tomando por sorpresa al pelinegro el cual justo se agacho para mirar a su perrito este le dio un beso en la mejilla y fue corriendo a su casa, dejando a un Hyunjin muy sonrojado.

-Que indecente.
Decía para luego tomar al perro y rápidamente ingresar a su hogar

MI PRIMER AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora