Una segunda oportunidad para amar

Sopresas

Simplemente no podía creerlo, él estaba parado frente a ella, había pensado que había bromeado que vendría

Yusuke: te quedaste callada
Lisseth: es que, es que es una agradable sorpresa, ¿también tienes un hotel aquí?
Yusuke: si, recuerdo habertelo dicho, pero bueno estare una temporada aqui, tu ¿que haces aquí?
Lisseth: bueno...

En el lugar donde se encontraban Lisseth y Yusuke era el centro de convenciones María Angola, donde ahora me estaba ayudando como asistente personal, mientras tenía tiempo libre

Yusuke: ¿asistente personal?
Lisseth: si, ahora que las cosas se me han complicado con lo de Michael, pues estoy trabajando por mi cuenta
Yusuke: entiendo él te mantenía
Lisseth: eso no sonó nada bien y si trabajaba
Yusuke: oye, lo siento, no fue mi intención, disculpame, que pasó con tu trabajo

A Lisseth no le gustaba que la tildaran de mantenida, ya que por lo contrario, ella había trabajado muy duro para no depender de nadie

Lisseth: era un negocio, que habíamos hecho juntos, era un restaurante
Yusuke: y el tipo se vengo quitandote el negocio, ¿verdad?
Lisseth: si, algo así, pero mi hermana me dio trabajo por mientras buscaba un local para un nuevo proyecto Y consigo dinero para invertir en un proyecto que estoy pensando hacer, claro que ella no quería al principio
Yusuke: ¿no quería? ¿que clase de hermana es? y seguro que tuviste que rogarle para que te de un trabajo
Lisseth: ¿que hablas? todo lo contrario, ella no quería que trabajará, porque ella quería ayudarme económicamente
Yusuke: ya veo, eres muy terca
Lisseth: mmm, no me gusta ser mantenida
Yusuke: ok, ok, bueno y se te puede invitar a comer al menos o ya sé, tu me quieres invitar
Lisseth: eso suena a burla
Yusuke: jajaja lo sé y donde esta ese pequeño travieso,
Lisseth: ahora se fue con Katherine y su novio a pasear
Yusuke: pero pensé que había venido contigo
Lisseth: solo vine a dejar unos documentos
Yusuke: umm bueno, así que Noah no está, lástima, tenía ganas de verlo, me conformare contigo
Lisseth: no pues, gracias, que honor, pendejo
Yusuke: avanza pendeja
Lisseth: ¿que dijiste?
Yusuke:  lo que me dijiste

Yusuke podía ser el dueño de los hoteles más conocidos del mundo, pero también tenía la fama de ser muy directo y molestoso, se puede decir, que Lisseth encontró a su horma de zapato

Mientras que por mi parte, como dijo Lisseth, me fui de paseo con Robert y Noah

Como había dicho, ahora pasábamos más tiempo juntos, nuestra relación había mejorado mucho y había temporadas en que me quedaba en su casa y él en la mía, él insistía en vivir juntos, pero temía aún que volviéramos a tener los problemas de antes.

Robert: nena, este gordo pesa mucho
Katherine: oyeme, no te burles que en algún momento te pondrás gordo y yo y este adorable bebé nos burlaremos a carcajadas, vas a ver que aquí unos diez años

Pero en ese momento su semblante cambio y pude ver que se deprimió, la verdad que me asustó, creí que mi broma había sido muy cruel, no lo creí tan sensible

Katherine: Robert ¿estás bien?, Robert
Robert: ¡No! jajaja

El muy idiota me asustó y salto encima mío y el canijo de mi sobrino más se reia

Katherine: bajate de encima mío!
Robert: no puedo, Noah esta encima mío y es muy pesado
Katherine: ni que pesará una tonelada, abusivo tu sí
Robert: jajaja me has dicho gordo
Katherine: sí

Era completamente odioso, pero lo adoraba, aunque me sacará de quisio y aunque estuviera el correteandome por decirle gordo...esos días con él habían sanado varias heridas

Él problema era que todavía sentía una incertidumbre y no sabía que era...¿sería que ya no era él del problema sino yo?

Y mientras, fortaleciamos nuestra relación, una parejita empezaron a frecuentarse más de una vez