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M E R A K I
Con el timbre indicando que comenzaba el receso, tome mis cosas y sali del aula con rumbo al patio donde Lola y Nico me esperaban luego de una semana de no verlos por su viaje. Camine por las escaleras lo mas rapido que mi piernas me permitian y al llegar a la planta baja, vi a lo lejos a la pelirroja que movia sus brazos buscando llamar mi atencion.
Sonrei y aumente la velocidad de mis pasos hasta quedar a unos centimetros de distancia y arrojarme sobre su pequeño cuerpo.
-Vaya, sabia que me extrañabas pero no eseraba tanto amor repentino.- Rio cuando nos separamos.
-Oh, si yo tambien estoy genial, gracias por preguntar.- Nico hablo sarcaticamente y me acerque a saludarlo también.
-No te pongas celoso umpalumpa.- Me burle rodando los ojos.
Se quejo por el apodo con el que lo llame mientras que su hermana rio.
-Tengo ganas de comer sushi, les parece que compremos de camino y almorcemos en casa?.- Lola pregunto, con Nico nos miramos y le respondimos con un asentimiento.
Durante el trayecto en el auto hasta el restaurante chino, escuchamos musica y charlamos de lo lindo que era el mar mediterraneo y de el grandioso bronceado que mi amiga habia conseguido. Luego llegamos al edificio y entramos al apartamento. Nico dejo el sushi sobre la mesa y yo me encargue de poner los platos y cubiertos.
-Mierda, esos tacones realmente son momestos.- La pelirroja bufo con molestia y se acomodo en su asiento.
-Te pasa por usarlos en una universidad de siete pisos y sin ascensores.- Su hermano la regaño, ella giro los ojos y se metio un rollito de salmon en la boca.
-Asi que cuentanos, cucaracha, paso algo especial en nuestros dias de ausencia?.- Interrogo.
-No mucho, di algunos examenes, ensaye como una desquiciada para la presentación, cuide a Nina, y...- No pude continuar, no sabia si decirlo.
-Y?.- El rubio me miro con una ceja arqueda.
-Kai Havertz respondio mis mensajes.- Informe tratando de sonar lo mas natural posible.
Nico comenzo a tocer atragantado con su jugo, mientras Lola tenia una expresión de completa sorpresa en el rostro.
-No jodas.- Exclamo saliendo de su transe.
Negue y ella se paro de su silla y comenzó a saltar de un lado a otro mientras su mellizo recuperaba la respiración.
-Oh por dios, como es que me voy una semana y te relacionas con uno de los futbolistas mas jodidamente sexys del mundo.- Chillo samarreandome por los hombros.
-No es para tanto.- Murmure bajo la atenta mirada de ambos Jensens.
-No me vengas con esas mierdas.- Nego y volvio a su asiento ya no tan exaltada.- Ahora vayamos a lo importante, ya te envio fotos de su pito?
