Una cita, una discusión.
TRES MESES Y UNA SEMANA DE EMBARAZO.
NARRA ENRRY.
Hace días con Marie asistimos a agendar una cita en una clínica, tengo varios amigos doctores por lo cual fue más fácil, Marie estaba empezando a pasar sus nervios. Dios mío, Padre celestial dame paciencia por favor.
—Marie cálmate —pedí
—No puedo ¿y si por no venir antes pasa algo malo? ¿y si me toca un doctor? ¿y si tú tienes miedo? —empezó a divagar y sólo tome una amplia respiración. —Porque si eso sucede todo cambiaria de rumbo y si me quieren tocar y yo...
No aguante más y la bese un beso algo largo y profundo que llegue a sentir como se relajó un poco.
—Nada va a pasar tranquila, novia.
—¿Sí? Si —se sentó en una silla y respiro profundo.
—¡Marie Murillo! —escuche a una doctora y ambos nos levantamos —pase.
Tome la mano de Marie y entre con ella al principio nos mantuvimos en silencio hasta que escuchamos hablar a la doctora nuevamente.
—Soy la doctora Leslie y me encargare de su embarazo... toma —le dio una bata a Marie —ve a cambiarte allá. —vi a mi novia irse y miré a la doctora —Sabes que son unos niños ¿verdad? No voy a darles la charla que ya debieron darles sus padres, pero es bueno que estes aquí bueno que ambos estén aquí significa que saben la magnitud de esto.
Asentí lentamente y agradecí, luego vi a Marie salir con la bata puesta algo sonrojada.
—Bien —mire a la doctora — según esto tienes trece semanas por lo que te realizare una ecografía intravaginal... será algo incómodo, pero nos aseguraremos de que tu bebe este bien ¿De acuerdo?
—De acuerdo —asintió Marie y luego de que la doctora de dijera como colocarse empezó.
Vi cómo se tensó, sabía que algo no iba bien así que me acerque a ella y la tome de la mano.
—Todo está bien ... miremos a la pantalla —dije con una sonrisa y ella me la devolvió.
—Aquí esta su bebe —ella presiono un botón y puso una máquina encima del vientre de Marie y empezaron a escucharse unos fuertes latidos, mire a Marie y ella estaba llorado por lo que la abrace... —en la recepción les darán las imágenes de su bebe. Es un bebe muy sano, no hay nada fuera de lo normal, te daré una cita para el mes que vine y te recetare unas vitaminas.
Ella empezó a arreglar sus cosas y Marie fue a vestirse por lo que me quedé en una silla sentado en silencio, recordando el sonido de los latidos del bebe de Marie y sin pensarlo sonreí. Cuando ella salió la doctora le dio una tarjeta y lo que ya había dicho, compró las vitaminas en farmacia y en la recepción agendo la otra cita y tomo sus ecografías.
—Gracias por traerme —la escuche una vez que salimos
—No hay problema, novia.
—Podemos...podemos ir al cementerio.
—Por supuesto —dije para ponerle el casco y luego ponerme el mío subir a mi moto y esperar a que ella lo hiciera.
Fue un viaje de alrededor de media hora hasta que llegamos... la vi entrar al cementerio sin esperarme y unos segundos después la seguí, se dirigió directo a esas tumbas, esas tumbas que sabía que eran una herida abierta para ella.
—Volví a pasar saben —la escuche hablar —, y duele porque sé que si ustedes estuvieran aquí no pasaría... —escuche su voz romperse —los amo, los amo mucho al igual que la falta que me hacen.
》 ¿Por qué yo? No lo sé... Pero quiero hablarles del que es su nieto. No me creerían como sucedió, pero es mío y hoy fui al médico. Escuche sus latidos, son unos latidos muy bonitos y fuertes se nota que es un guerrero. Y apuesto...apuesto a que será muy bonito o bonita como ustedes.
Luego escuche susurros mezclados con sollozos bastantes fuertes. Marie es más fuerte de lo que imaginas es alguien que no importa cómo, pero saldrá adelante, talvez eso le cause algo de problemas, pero ella es así y nadie puede tener el lujo de cambiarla.
Se quedo hay sentada mirando las lápidas fijamente, con los ojos rojos porque no puedo negarlo si lloré un poco y me senté a lado de ella para luego abrazarla.
—Aun no entiendo porque se fueron ellos —balbuceo —¿Porque ellos y yo no?
—No lo sé, lectora... pero si estás aquí es por algo —mire el cielo —hay que irnos si no quieres que nos agarre la lluvia.
Ella asintió y se levantó conmigo. Una vez llegamos a su casa empezó a llover y me invito a pasar a lo que obviamente no dije que no.
—Iré a darme una ducha y cambiarme espérame aquí- asentí, luego de unos 20 minutos subí hacia su cuarto y la puerta estaba abierta y entre, entonces la vi mirarse la espalda en el espejo, pero los morados en esta se vean muy dolorosos, llevaba ropa interior puesta y un vestido de dormir yo esta algo enojado porque me fijé en las marcas en sus brazos y piernas.
—¡Dios mío! ¡Marie! —exclamé algo enojado y ella di un salto en su puesto acercándome a ella.
—No digas nada, guarda silencio.
—Pero Marie —negó
—No quiero hablar de esto no entiendes.
—Sí, pero ...
—¡Pero entonces nada! ¡Sólo no hables y ya! ¡Aprende a que si alguien te dice que no quiere hablar pues no quiere hablar! ¡Y no! ¡No vengas con el me estoy preocupado por ti porque no necesito que te preocupes por mí! ¡No lo necesito!
—¡No me importa! —dije angustiado —¡si lo necesitas o no! ¡Estoy para ayudarte para eso llegue a tu vida! ¡No tengo ni una puta idea del porque vayas a ser madre!
》 ¡Y yo no pregunto porque sé que te va a incomodar! ¡Me preocupas tu y me gustas por en ende me preocupa la pequeña personita que llevas dentro de ti! No entiendo el porqué de las marcas, pero vamos a poner cámaras de seguridad aquí en tu casa.
Respire tratando de calmarme y luego escuche un sollozo. Mierda, la asuste ¿verdad?
—Hey Marie... tranquila linda —dije despacio y ella solo se acostó en la cama y se arropo de pies a cabeza...
—Vete... — escuche levemente —vete Enrry , sal de aquí...
Suspiré pesadamente y asentí, aunque no me veía.
—Nos vemos mañana en el colegio.
Dije despidiéndome y luego salí de la casa y arranqué mi moto... vi pasar un auto a mi lado en sentido contrario y luego me dirigí a mi casa. Este ha sido un día intenso.
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Hasta aquí por hoy ¿Como están? Espero que bien. Disculpen cualquier falla ortográfica.
-Teorías conspirativas.
- ¿Que tal la actitud evasiva de Marie?
-¿Que tal la actitud de Enrry en cuanto sinceridad?
Key-fuera
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Mi Vida Un Desastre
Teen FictionSIPNOSIS Marié Murillo es una adolescente de 15 años con estatus promedio, amada y consentida por sus padres. Nunca ha conocido la felicidad completamente y no ha tenido suerte para encajar en la sociedad, siempre termina siendo el títere o motivo...