FLORAL VIBES © |1|

Capítulo 14

PARTE 1

El lobo amado

Capítulo 14 - ALIÉNOR

Tengo una semana entera para relajarme, darme tiempo, ya que, las vacaciones están en su recta final, pero, mi mejor amiga no ayuda, pues no he hablado tanto con ella, como solíamos hacerlo, desde que llegué del campamento con los chicos solo le conté todo lo que sucedió la semana pasada en el bosque acampando con los chicos, obvio que omití cosas.

Durante estos días no he vuelto a soñar nada extraño, el episodio que sucedió en el bosque no lo quiero volver a repetir. Pero si he tenido fuertes dolores de cabeza, sudoración en el cuerpo y un episodio raro que tuve mientras estaba con el abuelo. Mis ojos cambiaron, el abuelo me comento que es normal en mi genética y me aconsejo estar más con los chicos.

—Ali, si me estas escuchando —dice poniendo la cara roja del enojo—Tu como siempre pensando en estupideces.
—Entonces, ¿Yo qué estaba pensando? —le hago una mirada pícara.
—En Don perfecto y sus escoltas —me mira con odio, aun así, la quiero mucho.

Unos chicos no nos han dejado de mirar, desde que llegamos a la pizzería, tengo la curiosidad a flor de piel. Me limito a mirar.

Llega el mesero, nos da nuestras pizzas y se retira, ponemos nuestra atención en lo más delicioso del mundo, nos comemos la pizza en segundos.

—Teníamos como hambre —dice mi amiga sin dejar de mirar el plato.
—Hace días no comía una de éstas —digo saboreando mi boca —no podrás creer que en los hoteles donde estuve no pude comer una deliciosa pizza.
—¿En serio? —dice mi amiga con el pitillo en la boca—Estabas como ocupada para no pensar en comida.
—En eso tienes razón —digo y termino la gaseosa en un sorbo— Fran tenía unos horarios y todo el santo día estaba ocupado.
—Qué bueno que esta vez no te acompañe —dice mi amiga, se cambia de puesto, termina al lado mío y añade— Espérame aquí.
—¿Para dónde vas? —digo sin dejar de mirarla.
—¿Para dónde más? —pregunta en medio en broma—Pues para el baño.

Mi amiga se levanta, pasa justo al lado de los chicos misteriosos, uno de ellos la sigue con la mirada, en cambio el otro no deja de mirarme, no sé si quedarme esperando a la bipolar de mi amiga o irme corriendo.

Me distraigo con el celular, no sé cuánto tiempo ha pasado, ¿será que Chris se quedó encerrada en el baño?, pues ya me hubiera dado cuenta con sus gritos de foca retrasada. Compruebo que me ha llegado un mensaje, precisamente de Chris.

Christine:
Me quede encerrada en el baño.

Yo:
Loca, espera le digo a alguien del servicio para que te ayude.

Christine:
No, mejor déjame aquí y encuéntrate con Don perfecto.

Yo:
Tú sí no.

Christine:
No te enojes.
Me perdonas, por favor.

Yo:
¿Quieres que me vaya así nomás y qué te perdone?

Christine:
Creo que tienes una dependencia emocional hacia mí.

Yo:
Joder, usted paga lo suyo.

Christine:
Está bien, no toda mi puta vida me tengo que quedar en el baño.

Cojo mis cosas, voy a la caja y pago lo mío.