Pasitos de Pingüino || Minayeon

O29

"La Crisis de pánico es un transtorno que puede desembocar en un deterioro importante en la vida cotidiana de la persona, llegando en ocasiones a paralizar a la persona. Con esto nos podemos encontrar en nuestras actividades normales y comenzar a sentir mareos, sudoración, náuseas, temblores, miedo o desmayo".

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Mina seguía llorando y Nayeon no pudo hacer otra cosa que llamar a emergencias.

Luego, se llevó a la menor dentro del edificio y les pidió a los porteros que le prohibieran la entrada al hombre de la vereda del frente. Sentó a Mina en una silla y se colocó frente a ella para mirarla.

–Vamos, Minari, has esto por mí, inhala y exhala, ¿Recuerdas? En pequeños pasitos.

–C-Como...P-Pingüi...nos...–Su respiración seguía demasiado agitada, hasta que perdió la conciencia y cayó en peso muerto sobre Nayeon.

La mayor se espantó, desesperada comenzó a pedir ayuda. Mina se había desmayado por los fuertes mareos que había experimentado.

Nayeon la acompaño todo el tiempo, luego de avisarle a su madre.

Fué con ella en la ambulancia, estuvo allí cuando la revisaron y ahora se encontraba sentada a uno de los lados de la camilla de la menor.

Otra vez con un respirador en su rostro. Sus ojos cerrados y su cabello negro que caía sobre sus ojos.

Nayeon no acostumbraba a llorar, jamás lo hacía.

Pero ahora, tomó la mano de Mina y la acercó a su rostro para darle un pequeño beso. Las lágrimas cayeron por sus mejillas, no había podido proteger bien a su pequeña.

–Lo siento, Minari, de verdad, lo siento.

La madre de Mina llegó rato después, encontrándose a la adolescente con la cabeza apoyada sobre la esquina de la camilla y con la mano de Mina entrelazada con la suya.

Acarició el cabello de su hija y dio palmaditas en la espalda de Nayeon.

Mina era afortunada por tener a alguien como Nayeon en su vida.