MARIONETA 14

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"DESPEDIDA DE AIKO"

La botella, se hallaba rota en el suelo, con el líquido derramado sobre la ropa del pelirrojo.

— ¿ Liam ? — Aiko rodeó la mesa y se arrodilló en el suelo dándole palmaditas en la mejilla al pelirrojo, pero este no abría los ojos

Asustada, solo pensaba en las terribles consecuencias que recibiría cuando la bestia se despertara. Se levantó del suelo asustada, el corazón no se calmaba, era más fuertes los latidos a cada minuto que pasaba y el pelirrojo no abría los ojos. Corrió hacía la puerta para escapar, pero antes de lograr rozar la manija, la puerta se abrió repentinamente y Aiko chocó con una persona.

— ¿ Pretendías escapar ? — Aiko se separó lentamente con los ojos llorosos, nunca la había visto — No te creas que te irás airosa después de tu indisciplina — sonríe mostrando sus dientes perfectos que parecían perlas

— ¿ Quien eres tú ? — pregunta temblorosa, era alta, su cabello rojo como el fuego, poseía unos ojos verdes oscuros, parecían tener un bosque dentro, con pecas adornando su rostro

— las de tu especie no tienen permitido hablar, a menos que alguien te lo ordene y no creo haberte dado ese preciado permiso — se inclina hacía delante — nos vemos mas tarde, encierrenla, no tiene derecho a comer hasta que Liam despierte y de órdenes al respecto — los guardias detrás de la mujer asienten y toman a Aiko a la fuerza para llevarsela — pobre rey, no puede con todo solo — camina calmada hasta donde se hallaba Liam inconsciente — ya es hora de poner orden aquí

(…)

— ¿ Cómo está Eric ? — Bella observa por los alrededores verificando que no hayan guardias cercas, ni el pelirrojo

— Me sorprende que aún este con vida por ahí afuera, le he estado llevando vendas para su herida, alcohol, pinzas y algunas cosas para que coma, no se como se las arregla en las noches — responde la albina

— ¿ entonces todo va como ambos planearon ?

— por ahora si, ya se han eliminado cinco guardias, es un avance — sonríe

— no nos relajemos aún, todavía faltan guardias y Liam cada vez está mas desesperado, tengo miedo que las cosas se pongan en contra

— ¿ Disfrutando el tiempo libre ? — se escuchan los pasos tranquilos de la pelirroja acercarse, Melody y Bella la miran confusas, ambas con la curiosidad de su identidad — Bella ¿ Verdad ? — la nombrada asiente con la cabeza — tengo entendido que no puedes estar merodeando por los pasillos sin la autorización de Liam

— No tengo que depender de un enfermo para hacer lo que yo quiera — La pelirroja ríe en seco

— Tampoco tienes permitido hablar con las marionetas ¿ solo porque eres la esposa de Liam te crees la reina que puede hacer lo que le plazca ? Aquí hay reglas y se deben cumplir — se cruza de brazos

— Pues estoy en contra de esas estúpidas reglas, ni caso le hago a Liam ¿ enserio crees que lo haré contigo ? patética

— Mas respeto inepta, tengo el mismo poder que Scott, si yo quiero puedo...

— ¿ El qué ? ¿ Matarme ? Ni siquiera ese imbécil me levanta la mano, ni el cañón de su pistola, no creo que tu tengas ese "poder"
No sé quien eres, tampoco me interesa, pero tú no puedes hacer nada en mi contra — toma a Melody de la mano disfrutando del momento — observa lo mucho que me importaron tus palabras — camina pasándole por al lado a la pelirroja, llevándose a Melody consigo

— Niñata insolente...

(…)

El llanto de Aiko se escuchaba fuerte, Liam en la madrugada se había despertado, se había tratado la herida y furioso decidió darle una visita amenazante. La pelirroja le abre la puerta y sin rodeos entra observando a la asiática en el suelo, en cuanto sus rasgados ojos se encontraron con el pelirrojo ardiendo en cólera, su llanto aumentó.

— Deja de llorar de una vez, me irritas — se queja y la asiática intenta detenerse, se limpia la cara con sus dedos y mantiene su mirada en el suelo, temblorosa ante Liam, se queda callada, respirando hondo — Vamos hablar Aiko, las personas para entenderse, usan el diálogo pacífico ¿ No es así ? — Aiko asiente sumisa — pero el problema es que yo no soy pacífico y mucho menos me gusta perder el tiempo hablando, pero contigo haré una excepción, cuéntame Aiko, ¿ Porqué ayer me rompiste la botella de vino en la cabeza ? Vamos, explícame

Aiko levantó la mirada, lo único que hacía era temblar como un corderito frente a un depredador.

— Tu pregunta es...— no estaba segura de poder hablar, tenía miedo, sentía que si seguía hablando se iba a romper a llorar, mientras que el pelirrojo, disfrutando del miedo de Aiko, se concentraba en amenazarla con la mirada — antes de contestarte, ¿ Que harás conmigo después ? — Liam solo sonríe

— no preguntes algo que es obvio — se acerca a Aiko y se pone en cuclillas para estar a la altura de ella — Acabaré contigo — levanta la mano y la posa en la cabeza de la Geisha para así comenzar acariciarla — lo único que has estado haciendo últimamente es ponerte una soga en el cuello y ya es la hora de quitarte esa silla que hay debajo de tus pies para que te ahorques, pero tranquila, me aseguraré de que no tengas una muerte lenta — Aiko traga en seco dejando libre sus lágrimas

La asiática, tenía que enfrentarse a la realidad, no había forma de cambiar su destino, sin mas remedio, era su última oportunidad de sacar la rabia acumulada dentro.

— Te merecías mas que un simple botellazo en la cabeza — comienza hablar mirando como el pelirrojo se levanta y camina por el alrededor, su mirada se concentra en el parche blanco en la zona donde impactó la botella — acabaste con toda mi familia, con mi mamá, mis hermano, mi hermanita, ¡ Todos ! destruirte lo que era mi hogar, solo eres alguien cruel, sádico y egoísta, solo te interesa tu felicidad haciendo sufrir a inocentes niñas, eres un asqueroso y mentiroso, de verdad te merecías mas que lo que te hice, pero espero y sufras las graves consecuencias de convertir la vida de las niñas, de Bella y la otras personas que estan muertas por tu culpa en un infierno

— ¿ Terminaste ? — provocando molestia en Aiko, pregunta el pelirrojo como si las palabras de la asiática no valieran — espero que te hayas desahogado, ya se que haré contigo

(…)

— ¡ NO ME DEJES AQUÍ ! — gritaba Aiko entre lágrimas

— que recuerdo mas hermoso acaba de pasar por mi mente — sonríe Liam observando a Aiko — de una vez que una prostituta de quinta se pasó de lista conmigo, acabó de la misma manera en la que acabarás tú

Aiko estaba atada a las ramas firmes de un árbol en la zona de los osos. Unas sogas amarrando sus muñecas, no estaba tan alta del suelo.

— no te muevas mucho, si es que no quieres sufrir la horrible sensación de sentir tu cuello siendo cortado — ríe — tienes un hilo en tu cuello, es de los que si te mueves mucho te cortan, es por si en algún momento te lograrás soltar de las sogas en tus muñecas, ese hilo hará el trabajo final, morirás desangrada que devorada por mis bestias

— ¡ LIAM POR FAVOR NO ! ¡ PREFIERO QUE ME DISEQUES PERO POR FAVOR NO ME HAGAS ESTO ! ¡ LIAAAAAAAM !

El pelirrojo junto con sus guardias que lo ayudaron con Aiko, se retiran disfrutando de los gritos desesperados de la niña.

— Hagan sus apuestas señores ¿ Aiko morirá devorada por los osos o desangrada ? — se ríe — el que gane recibirá cinco mil euros — Los guardias se ríen aceptando la apuesta — ay Alba, que en paz descanses — se burla

Y en ese mismo momento, se escuchó un disparo...

— que mierda...— Liam y los guardias sacan sus armas y miran a todos lados

— el disparo se escuchó del otro lado señor — señala con su dedo índice frente a ellos la arboleda del otro lado

— Ya sé — los tres siguen caminando, alejándose de los árboles en donde Aiko no dejaba de gritar, pero Liam se detiene al ver a Melody salir de la casa junto con uno de sus guardias, la albina señala en donde se escuchó un disparo y el guardia corre hacia el lugar — con que así son las cosas...


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