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-¡Wow! - dice Alya, que está con Marinette -. Creo que tienes un admirador secreto.
-¿E-enserio? - Marinette ha leído la carta que le dejé, que decía algo así:

"Hola, Marinette. Te amo. Eres una chica maravillosa, y espero que en el futuro podríamos ser pareja.
Te amo, Marinette".

No me ha descubrido ya que he cambiado mi letra. Espero que nadie me haya visto dejándole la carta.
Creo que tengo que mejorar con las cartas de amor. Ha sido un poco soso, pero yo nunca he dado una carta de amor a nadie. Así que no sabía muy bien cómo se hacían.
Hoy Sabrina sí que ha venido, y Adrien también. Supongo que ya se encuentran bien.
-¿Ya estás mejor, Sabrina?
-¿Eh? Sí, claro, Chloé - parece un poco sorprendida por mi  pregunta, pero me contesta de prisa.
Terminamos clases y nos vamos a casa, después de un largo y aburrido día. En casa me pongo a hacer los deberes, pero al poco tiempo se escucha un gran ruido que viene de afuera. Como siempre, Hawk Moth ha demonizado a alguien. Ni un día de paz se puede tener. Salgo a la calle para observar de cerca al villano. ¿Por qué? Ni yo misma lo sé. Veo que hay un hombre mayor andando tan tranquilo, pero el villanos lo está a punto de aplastar. Así que corro hasta llevarlo a un lugar a salvo. El señor me lo agradece y yo vuelvo a casa.
Ha sido raro, ya que normalmente lo hubiera ignorado, sobretodo si ni lo conozco. Sienta bien ser amable con la gente. Al llegar a mi cuarto, veo una pequeña cajita de madera con un símbolo pintado en color rojo. Abro la cajita por curiosidad y una luz amarilla emerge de la caja. Sorprendida y asustada, retrocedo en busca de mi peluche. Lo cojo y abrazo, mientras un bicho-abeja me habla:
-Hola, soy Pollen - le lanzó un vaso, pero parece que no le duele y el vaso se rompe en el suelo -. Calma, no te dañaré, mi reina. Soy un kwami.
-¿Un qua- ¿qué?
-Un kwami. Y otorgo poderes, Chloé
-¡Papi! ¡Un bicho-abeja que sabe mi nombre....!
-¡No!- me interrumpe la tal Pollen -. Escúchame, porfavor.
Me lo pienso, pero al final accedo a escucharla. Me cuenta que ella es un kwami que otorga poderes a la gente y los convierte en superhéroes. Me cuenta que Ladybug y Chat Noir también tienen su kwami y su Miraculous, una joya mágica. Al terminar de hablar, me pregunta:
-¿Quieres ser una superheroína, mi reina?
-No lo sé. Me he portado muy mal, he dañado a mucha gente, entre ellos mis compañeros de clase. No merezco el Miraculous.
Pollen se acerca a mí con confianza y me dice:
-Mira, Chloé. Tú eres una gran persona, y ahora lo estás descubriendo y cambiando a mejor. El Maestro Fu (el Guardián de los Miraculous) te ha elegido a ti por algo. Tú también puedes ser una superheroína. ¿No te gustaría serlo?
-¡Sí! Yo también puedo ser una superheroína.
Entonces me pongo la peineta y me transformo para ayudar a mis compañeros de batalla, Ladybug y Chat Noir.
-¡Pollen, aguijones fuera! - después de eso, una magia me envuelve y yo hago unos pasos para completar la transformación. Es una sensación increíble. Y el traje no molesta ni aprieta, siento que soy más ágil, rápida y fuerte. Y tengo un súper-poder que se llama picadura, con el cual puedo paralizar a mis oponentes. Esto de ser una superheroína perece emocionante.
Pollen ya me ha aceptado como superheroína, y yo también. Y ya no tengo miedo se serlo, es mi sueño hecho realidad.
Pero ahora queda la parte más difícil de todas: Que Ladybug y Chat Noir me acepten como compañera de batallas.

Yo también puedo ser una heroína (Chloenette)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora