2* Compañero Determinado

Capítulo 5

Mew se detuvo en el camino de entrada a las seis de la noche. Era más tarde de lo habitual, porque se había detenido a comprar un regalo para Gulf de camino a casa. Había tenido una sonrisa perpetua en su rostro durante todo el día en su trabajo. Zol y Tommy se habían dado cuenta y lo comentaron una o dos veces. Mew no estaba dispuesto a soltar que había encontrado a su compañero, por lo que evadió sus preguntas y se concentró en sus clientes.

Era difícil, porque los pensamientos de Mew siempre volvían a Gulf y se encontró preguntándose cómo estaría su compañero. Al entrar en la cocina con su regalo, se dio cuenta de que no veía a Gulf por ningún sitio, Saint lo vio y se apartó de Zee, quien acababa de abrazarlo.

— ¿Podemos hablar en la sala un minuto?

Mew miró a Saint y frunció el ceño.

— ¿Puedes esperar hasta que vea a Gulf?

—No.

El ceño de Mew se profundizó, pero siguió a Saint a la sala de estar. Saint no se sentó, pero se giró y miró a Mew directamente a los ojos.

—Gulf está en tu cama descansando en este momento.

Mew arqueó una ceja ante la declaración de Saint, pero antes de que pudiera hacer cualquier pregunta, Saint continuó.

—Era donde quería estar. Se sintió seguro allí anoche y necesitaba sentirse así otra vez.— Después de tomar una profunda respiración, Saint continuó.- hemos hablado esta tarde. Bueno, Gulf habló y yo escuché. Me contó lo que le pasó.

—mie**a. ¿Puedes contármelo?

—No. Eso depende de Gulf, le dije que tenía que contártelo, pero le toca a él compartir los detalles. Te diré que tienes que ir despacio. Tiene miedo de que lo dejes si averiguas lo que le pasó. Sé que a Gulf le gustas, y ya se siente seguro contigo, y después de lo que ha pasado, me parece increíble. No sé si yo hubiera sido tan fuerte si me hubiera pasado a mí.- Mew pudo ver el escalofrío que recorrió el cuerpo de Saint con ese pensamiento.- ha tenido un día muy emotivo. Solo sé amable con él, Alfa o no, si le haces daño a mi amigo, encontraré una manera para hacértelo pagar, ya ha pasado suficiente.

Saint logró permanecer de pie y mirarlo a los ojos durante todo su discurso, Mew podía decir que no era alguien que mirara a los ojos a su Alfa y le amenazara y luego diera marcha atrás. Mew le sonrio sabía que los amigos eran muy protectores uno con el otro, aunque nunca pensó que su cuñado lo amenazaría.

—Confía en mí, Saint no tengo planes para herir a Gulf jamás. Si lo hiciera, te permitiría con mucho gusto tomar venganza cuando me detuvieras, ya que creo que mi vida estaría acabada de todos modos.— Mew lo dijo tomando la mano de Saint como señal de que entendía lo que le estaba diciendo. Saint dio un paso adelante y le estrechó la mano.— Vuelve con Zee y dile que yo he dicho que necesitas mimos. Tengo un compañero a quien ir a buscar.

Mew se dio la vuelta y subió las escaleras a su cuarto. Al abrir la puerta, su mirada se dirigió inmediatamente a la pequeña criatura acurrucada en el centro de su cama estrechando una almohada contra su pecho. Caminó en silencio por la habitación. Mew se dirigió a la cama y se sentó junto al cuerpo dormido de Gulf. Se sentó allí durante un minuto, observando la expresión de preocupación en el rostro de su pareja. Dios, daría cualquier cosa por ser capaz de tomar el dolor y los recuerdos que tenía que soportar todos los días, y alejarlos de su compañero. Acercándose, KyuHyun, retiró el pelo de los ojos de SungMin.

—Cariño, es hora de despertar —murmuró Mew en voz baja mientras se inclinaba y lo besaba ligeramente. Gulf se agitó, sus ojos revolotearon cuando regresó poco a poco a la tierra de los vivos. La sonrisa que se instaló en la cara de Gulf al verlo, causó que su corazón latiera más en su pecho.