11 | Duelo.

545 48 1
                                    

Después de los anteriores sucesos nada relevante pasó... Excepto una pequeña charla de jin y izuku.

Además de qué melissa no recordó el cómo llego a su habitación y eso le asustaba un poco, pero dejando eso de lado, su día fue increible y terminó agotada.

Momo dormía con total tranquilidad de saber qué entrenaría junto a una persona qué atesora mucho y el sentimiento es mutuo.

Y otras cosas pasaron en otros lugares, pero eso no recién se dara a cabo en el festival deportivo.

Ahora el sol salía y entraba débilmente por un cuarto qué se denotaba sus excesivos muebles y calidad en todas las cosas.

*Pov momo*

Y aquí estoy yo.

Durmiendo con un poco de preocupación con un toque ansioso de lo qué podría ocurrir hoy dia.

Después de todo, técnicamente traería a un chico a la casa y tengo algo de miedo por como reaccionen mis padres.

Abri mis ojos lentamente viendo lo primero mi techo.

Me quede quieta por 3 segundos y saqué fuerzas para levantarme quedándo de pie junto a mi cama.

Bosteze mientras me estiraba.

Mi cabello estába suelto y revuelto además de llevar puesta una pillama... Lo usual.

Luego vi la ventana con curiosidad, Quiero saber qué hora es.

Ayer no dormí con tranquilidad pensando en éste dia, el sólo pensar qué tendré un compañero en mí mansión me pondría un poco incómoda, y más si mis padres piensan otro tipo de cosas.

— Ugh.

Movi las cortinas y entró una gran cantidad de rayos solares en mi rostro, golpeando mi rostro.

— Espera... —Mire mi celular al lado de mi cama— ¿Qué hora es? Parece muy tarde.

Agarre mi celular y lo prendi, tenía un 50% de batería.

— !!!?

Eran las 9:30.

Me mire al espejo en mi cuarto notando mí cabello revuelto y todo desmoronado, mis dientes se hicieron visibles con nervios mientras me agarraba la cabeza.

— Carajo. —Maldije hacia mi misma con nervios— No puedo estár presentable así...

*Bruwn* *Bruwn*

— ¿Huh?

Mi celular vibro y fui a ver qué era.

— !!??

[Éstoy cerca, llegaré en aproximadamente 30 minutos. 😉]

¿Qué podía sentir? ¿Nervios? ¿Conmocion? ¿Ansiosidad? ¿Por qué no todas?

Tire mi celular a la cama y me encaminé casi rápidamente hacía mi puerta saliendo de mí habitácion.

— Muy buenos días señorita momo.

Un simple pupilo de tempest: "izuku"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora