¡Choo-choo!
Con el silbato del tren, que anunciaba la parada de este al Imperio, todos los ponies y otras criaturas dentro tomaron sus equipajes y se prepararon para salir. Twilight, tras ajustar su bolso en su lomo, también se dirigió a la salida del vagón.
Dos guardias la esperaban afuera y al verla ambos se postraron, hablando al unísono—Bienvenida al Imperio de Cristal, princesa Twilight Sparkle.
—Muchas gracias, —Respondió Twilight, inclinando un poco su cabeza y sonrojándose, ¿alguna vez se acostumbraría a ser llamada con tanto respeto y admiración? Tras mirar un poco a su alrededor, sólo viendo a las pocas criaturas que quedaban en la estación, preguntó—Perdón, pero, ¿dónde están Cadence y Shining Armor?
—Ellos se encontrarán con usted en el palacio, por favor, síganos princesa.
Sin más que decir, Twilight solamente empezó a seguir la escolta hacia el Palacio. ¿Por qué Cadence y Shining no fueron a recibirla? Es que acaso... ¿el problema que decian es tan grave? Pero mirando a su alrededor, simplemente viendo las calles, casas y jardines decorados en cristal resplandeciente, no encontró ninguna respuesta a su pregunta, nada se encontraba fuera de lo normal, no había ponies decaídos ni una tormenta de nieve y magia amenazando con inmovilizar todo a su paso.
Retomando su vista al camino y con la imagen del palacio acercándose más y más, la preocupación paso a segundo plano frente a la emoción, pues los mismos ponies que la tenían tan preocupada estaban esperándola a entradas del palacio. En serio debo dejar de esperar lo peor, se repitió Twilight, riéndose para sí misma.
No quedaban más que un par de metros para llegar al Palacio cuando una risa fuerte e infantil se escuchó, seguido por un:
—¡Tía Twyla!
Junto a un Shining Armor corriendo para alcanzar a la pequeña potranca que se acercaba volando rápidamente a Twilight.
—¡Flurry Heart! ¡Oh, no tienes idea cuanto te he extrañado! —Dijo Twilight, pillando y abrazando a su sobrina, dándole besos en sus pequeñas mejillas, la niña solamente riendo cada vez más con cada mimo que recibía de su tía.
—¡Twily, no sabes el gusto que nos da tenerte aquí! —Habló Shining Armor con una sonrisa al llegar a donde sus dos personas favoritas en el mundo se encontraban. Saludo con la cabeza a la escolta, quienes remedaron el gesto y se retiraron, entendiendo que su capitán se encargaría de la situación. Cadence llego poco después, mirando con ternura la escena.
—¡Por Celestia, mírala! Esta más grande cada vez que vengo a visitar. —Río Twilight mientras sujetaba a Flurry Heart entre sus cascos. —También me da gusto verlos a los dos. —Continuó con la misma alegría.
—No podría imaginar algo mejor que tener tu compañía, Twilight. —Dijo Cadence, y con una sonrisa juguetona agregó, —Y bien, ¿no hay algo que te estas olvidando, Twily?
La susodicha sonrió inmediatamente ante la actitud de su cuñada, dejando suavemente a Flurry Heart en el piso antes de acercarse a su antigua niñera, y empezar a cantar:
Rayos de sol al despertar,
Choca los cascos
¡Y luego a saludar!
—¡Aw, Twilight, siempre es una alegría tenerte aquí! —Cadence tomó a su cuñada en un abrazo fuerte que Twilight correspondió.
—¡Rayos... al despertar!
Los tres ponies presentes se rieron levemente al ver a la pequeña princesa intentar imitar el saludo secreto de su madre y tía, bailando torpemente, pero decidida. —¡Ah, un día deberíamos enseñarle a Flurry Heart nuestro saludo! —Apuntó Twilight, sonriendo de oreja a oreja, agachándose hasta estar al nivel de la potriarca y acariciar su cabecita.
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Teoría Del Romance [MLP: FiM Fanfic]
FanficEquestria está en paz y ahora solo quedan asuntos personales por resolver. Tras ser llamada al Imperio de Cristal, Twilight se reencontrará con cierto poni que hará que sus sentimientos salgan a flote y se cuestione que debe hacer. ¿Tomará valor y r...