Alexander

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Andi regreso a su hogar observó el lumbral de su casa se veía tan lejano y una fuerte sensación de malestar se alojó en su pecho.
No quería entrar pero tampoco tenía a dónde ir observo su celular muchas llamadas y mensajes perdidos de Emilia, suspiro y guardo el teléfono en su bolsa.

Emilia se mordió la uña nerviosa, Andi no había hablado con ella las vacaciones le parecían eternas lo único que quería era disculparse y recuperar a su bella ex. El culpable de su dolor tenía nombre y apellido e iba hacer todo lo posible para hundirlo.

Afuera un fuerte trueno despertó a Esteban quien se incorporó asustado mientras miraba hacia dónde debería estar Luka, pero el rubio no se encontraba.

Esteban salió de su cama y aún con la sensación de a ver perdido algo observó el pasillo todo parecía normal.

—Luka?— Esteban lo llamo pero solo había el constante sonido de la lluvia.

Esteban comprendió que estaba solo y eso no se lo había esperado, fue de nuevo a su cuarto y tomo su celular mientras llamaba a Luka pero solo lo mandaban a buzón.

Por otro lado Luka se encontraba en su lobby observando la lluvia caer mientras tomaba un té para calmar su ansiedad.

Los truenos iluminaban la habitación y el sonido de la lluvia le hacía comprender que se encontraba solo, dejo el te aún lado y se abrazo las rodillas mientras comenzaba a llorar, extrañaba a Esteban el olor de su shampoo por la mañana y sus suaves labios, pero también comprendía que nisiquiera había recibido una disculpa o explicación.

Su celular comenzó a vibrar en la mesita aún con las lágrimas secándose en sus mejillas tomo el celular y lo apagó.

En la oficina Marcelo se recargo en su silla sentia como los recuerdos de aquellos días lo golpeaban con fuerza.

La manera en la que la madre de Esteban lo besaba como por alguna razón u otra sus cuerpos se conectaban como si siempre hubieran esperado por eso.

También recordo con efervescencia lo mal que se sintió al descubrir que la mujer estaba casada y que tenía un hijo, el como se había alejado de ella y comenzado una discusión por las mentiras el como había arrancado el collar de su cuello para después insultarla.

—Señor?— la voz de su asistente sumada al trueno lo hizo volver a la realidad. -Lo esperan-

Marcelo trago pesado mientras se pasaba la mano por la cara tratando de recuperar su compostura.

Esteban se dejó caer en su cama mientras miraba el techo, Luka seguía sin responder.

Tomo nuevamente su celular y comenzó a ver las redes sociales.

El amigo de Luka había subido su ubicación se encontraba en un restaurante francés, Esteban no dudo tomo su chaqueta y salió en busca del tipo.

Luka preparo la tina con algunas rosas y unas cuantas escencias se sirvió una copa de vino para después sumergirse en la tina.

El agua estaba a la temperatura perfecta y el vapor lo hizo alucinar, pues aún podía sentir los labios de Esteban por todo su cuerpo.

Luka tomo otro trago de vino mientras comenzaba a decender con su mano por su abdomen hasta su pene.

—mmm— Cerro sus piernas mientras seguia acariciándose a si mismo.

Esteban llegó hasta el restaurante y en una de las mesas del fondo el amigo de Luka continuaba tomándose fotos.

Se acercó con cautela pero Esteban era terrible para no parecer amenazante.

El amigo de Luka observo al chico frente a el, y vaya que el desgraciado era atractivo aunque él no se quedaba atrás.

Los ojos miel del amigo de Luka y los cafés de Esteban hacían competencias por el dominio de la situación.

—Si solo vas a quedarte ahí será mejor que lo hagas sentado o te cansaras— El chico tomo un poco más de su café.

Todo el mundo al rededor miraba a los chicos esperando cualquier reacción pues era demasiado palpable la tensión, como si estuviesen a punto de ver una pelea de un doberman contra un akita Inu.

—Gracias— Esteban tomo asiento frente al chico.

—Alexander, por fin nos conocemos— Alexander sonrió con seguridad sin darle la mano eso solo eran formalidades.

Luka comenzó a mover con más necesidad su mano, mientras comenzaba a sentir las primeras cosquillas en el centro de la columna.

Sus gemidos podían verse atravez del vapor que emanaba su boca mientras se concentraba en la imagen de Esteban.

—Esteban!— su semen se derramó en el agua mientras Luka terminaba exahusto.

Rebelde siguiente generaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora