Dos Pares De Imponentes Ojos || Uchiha Shisui

~ 07 ~

Kaori estaba dispuesta a seguir al sannin, de no ser por la cantidad de ninjas ANBU que la rodearon.

— Kaori —la llamó el que parecía el líder del escuadrón, con sequedad—, el Hokage requiere de su presencia inmediata ante él.

— ¿Y manda a cazadores ANBU para escoltar me hasta él, no? —preguntó con sarcasmo Kaori— ¿Qué quiere Danzō?

— No te incumbe —respondió el mismo ANBU.

— Pues si Danzō tiene algún asunto pendiente con mi familia, que venga él personalmente —anunció Kaori con frialdad.

— No estás en posición para dar órdenes —contraatacó el ANBU mientras los demás se ponían en pose de pelea.

— Y ustedes no están en posición de venir a mi casa a hacer lo que Danzō no hace por cobarde.

— Tienes razón, Kaori —intervinó una voz que Kaori reconoció al instante—, pero son órdenes superiores.

— Ataquen —ordenó el líder ANBU a los otros, quienes acotaron la orden enseguida.

Todos los ANBU presentes se lanzaron contra Kaori en un instante, sin ser conscientes del valiente e imprevisto movimiento de está última.

[A los pocos minutos con Shisui]

Shisui se encontraba almorzando en su oficina, pues al llegar tarde se había retrasado más la inmensa montaña de papeles en su escritorio que lo llevaba esperando más de una semana.

Repentinamente, una nube de humo se hizo presente sobre su escritorio por lo que en, un rápido movimiento, guardo su almuerzo en uno de los cajones de su escritorio, se limpió la boca, que estaba machada de salsa BBQ, y tomó un papel al azar para seguidamente fingir que lo leía.

— ¡¿Pero qué de-...?! —lo interrumpió una voz chillona.

— Uchiha Shisui —se trataba de un pequeño sapito color verde opaco con manchas amarillas y naranjas por todo el cuerpo. Llevaba un chal café—, el Yondaime Hokage, Minato-sama me mandó a avisarle que requiere de su inmediata presencia en la sala de interrogatorios S —informó el sapito para seguidamente desaparecer en una nube de humo.

Con flojera, Shisui se levantó de su silla, se estiró, tomó su almuerzo y se encaminó hacia la sala de interrogatorios S, que se encontraba a casi el otro lado de la aldea.

Al llegar a la sala de interrogatorios S, ya habiendo acabado con su almuerzo, se adentró al gran edificio, donde en la puerta de una sala en específico lo esperaban el Yondaime junto a Nara Shikaku y Makani Wōka, el líder de la división de ANBU especializada en rastreo y captura, quien tenía una herida bajo el ojo derecho.

— Yondaime, Shikaku-sama, Wōka —saludó Shisui haciendo una leve reverencia. Los dos primeros regresaron el gesto mientras Wōka solo inclinó ligeramente la cabeza—. ¿Para qué requieren de mi presencia?

— Shisui —llamó Minato mirando de reojo a Wōka—, necesitamos de tus habilidades con el sharingan —señaló la puerta detrás de ellos.

— Mi unidad y yo —empezó a hablar Wōka— estábamos volviendo de una misión cuando se nos advirtió de la presencia del sannin Orochimaru, continuamos el camino alertas. Sentimos el chakra de Orochimaru unos kilómetros más adelante, estaba hablando con la chica —Wōka miró hacia la puerta de mental—. Dejó a mis cinco hombres en el hospital, pero se contuvo.

— ¿Se contuvo? —preguntó Shikaku.

— Se implantó un sharingan en el ojo izquierdo, además de saber técnicas Hyūga —informó Wōka—. Me retiro —terminó en dirección a Minato mientras hacia una leve reverencia. Minato imitó su gesto y Wōka se retiró.

Minato junto a Shikaku y Shisui abrieron la puerta de metal, dando paso a ver a una chica de cabello negro en picos con una gruesa venda en los ojos, donde su ojo izquierdo sangraba, sentada en el medio de la sala. Tenía ambas manos amarradas con hilos de chakra en la espalda. Frente a ella había un ANBU de Raíz.

Y por alguna extraña razón, a Shisui no le sorprendió que fuera Kaori.