Mute [Heewon] ¹

dieciocho

---¿Ya se van de luna de miel?

---¿Y nos dejan solos?

---¿Ni siquiera se les ocurre llevar a los padrinos de bodas?

---¡Hey, no! ¡yo soy el padrino!

"Cállense, idiotas"

---Wonnie, ¿no estarás escribiendo esas malas palabras tú, verdad?.

El chico mudo se apresuró a tachar lo que había escrito, ocasionando risas entre los presentes, incluso en su madre, que dejó algo en el auto para luego volver a su casa.

Ese día se iría a Busan por casi una semana, para que Jungwon se hiciera la revisión con su médico de toda la vida, y tendría tiempo para cualquier estudio que necesite, y luego para recibir los resultados.

Niki y Sunoo habían ido a casa de Jungwon para despedirse, pero todo lo que habían hecho fue quejarse de que ellos no irían y que Heeseung sí, alegando que "lo quería más a él que a ellos".

---Dejen de molestarlo, par de monos --- musculló Heeseung, mientras pasaba cargando su equipaje.

El mayor entraba y salía todo el tiempo de la casa de los Yang, ayudando a llevar todo lo que necesitaban.

---¡Heeseung!

---Cállate un poco Niki, estoy a un metro, no grites --- respondió

---¿Quién de los dos será el padrino? --- señaló a sí mismo y luego al chico en la silla varias veces.

Heeseung frunció el ceño, haciendo una mueca.

---Mis hijos tendrán un padrino millonario que le regale cosas costosas, hasta que ninguno se haga empresario no serán padrinos de nada.

Las palabras hicieron reír a Jungwon.

---Estábamos hablando del padrino de bodas --- dijo Sunoo, divertido

---¿Qué boda? --- Heeseung se había perdido toda la conversación, y esos idiotas hablaban como si él supiera todo.

Ambos castaños señalaron a Jungwon, Heeseung fijó su mirada en él, viendo que apuntaba hacia él, para luego volver la mano hacia su pecho.

---Pero gracias por admitir que tendrías hijos con Jumgwon --- Niki sonrió ampliamente, el comentario hizo reír a Sunoo y las mejillas del mudo se tíñeron de rojo.

Heeseung se puso bastante nervioso.

---Sólo por eso el padrino de boda será Jake --- dijo, entrando apresuradamente a la casa de los Yang de nuevo.

El comentario hizo que un "Ohhh" saliera por parte de Niki y Sunoo, haciendo a Jungwon avergonzarse.

Yo soy la madrina