La reina

571 al 580

Capítulo 571: Un estofado

Después de que ella y Le Anqi comieron, los dos salieron y Le Anqi tomó un taxi de regreso.

Su Cha sintió que los paparazzi que la seguían no se fueron.  Caminaba sola por la calle.

El auto de los paparazzi la siguió a un ritmo constante.  Algunas personas en el automóvil la miraban fijamente, pensando que definitivamente era inusual que Su Cha caminara afuera en medio de la noche.

Se emocionaron y pensaron que podría haber algo que informar.  Sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos, Su Cha parecía haber caminado hacia las sombras.  Cuando se enfocaron, ella había desaparecido.

Uno de los paparazzi que la había estado mirando estaba atónito.  Parpadeó con fuerza y, cuando volvió a abrir los ojos, ella ya no estaba.

"¿Que demonios?"

"¿Por qué está desaparecida?"

¿Nos ha descubierto?

"¡Incluso si nos vio, no debería haber desaparecido!"

Los paparazzi maldijeron mientras bajaba del auto en el lugar donde ella había desaparecido.  Era solo una intersección con un sitio de construcción rodeado de láminas de hierro.  Mirando hacia adelante, vio que era una calle principal brillantemente iluminada.

Los paparazzi miraron a su alrededor y lo encontraron extraño.

¿Por qué desapareció?

Por supuesto, Su Cha usó su qinggong para volar.

Desapareció en las sombras.  Los paparazzi en el auto no pudieron reaccionar a tiempo.

Era demasiado perezosa para usar otros métodos para deshacerse de ellos.

Que piensen que han visto un fantasma.

Cuando regresó al Lookout Pavilion, era tarde en la noche porque había pasado un rato comiendo un estofado con Le Anqi.

Cuando llegó a la puerta, vio que Bai Kun salía con alguien.  Al verla, Bai Kun parecía como si hubiera visto a su salvador.  “Señorita Su, ha vuelto.  Ve a ver al joven maestro.  Él está enfermo hoy”.

"¿Él está enfermo?"

El corazón de Su Cha se apretó por un momento.  "¿Cómo se enfermó?"

Bai Kun tenía una expresión amarga en su rostro.  “No lo sabemos.  Contratamos a un médico después de que volvimos.  Tiene fiebre alta..." Murmuró, "No sé cómo se las arregló para aguantar hasta ahora".

Había insistido en irse a casa antes de buscar un médico.  Su objetivo era obvio.  Sabía que ella tenía que volver en algún momento y la estaba esperando.

Su Cha no lo escuchó y se apresuró a entrar en la habitación.

El médico al lado de Bai Kun se sorprendió.  "¿La esposa del joven maestro?"

Bai Kun se quedó atónito por un momento antes de reaccionar y asentir.  "Sí."

No importaba si era cierto o no.  Definitivamente era cierto en el corazón del joven maestro.

Tan pronto como se publicó el informe de la entrevista, se confirmó la identidad de la señorita Su.

…

“¿Por qué tienes fiebre?”

Al entrar en la habitación, Su Cha vio inmediatamente a la persona acostada en la cama.  No era diferente de lo habitual.  Solo se acostó en la cama con los ojos cerrados como si estuviera dormido.