Four: I need you.

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Narrador Omnisciente.

Las horas pasaban convirtiéndolas en días, meses. Jeremy tenía ahora 3 amigos quien contar, aún que a Schmith no podía pensarlo como amigo, pensarlo en otra manera era algo extraño para él.


En el caso de Jeremy, sus heridas curaban dejando una línea blanca resaltada en su piel donde alguna vez estuvo sangre y cicatrices. Había aumentado 2 kilos, no era mucho pero era a pasos lentos y seguros. Su padre había conseguido trabajo y no ha llegado a la residencia Fritzgerald ebrio. Su madre era más atenta a su familia, dando debido tiempo al trabajo y otro a su familia. Después de lo ocurrido con John, aquel sólo miraba a Jeremy con debido rencor, no lo agredía por no ensuciar su título de buen alumno. El de tez blanca vio la cruda verdad de que nunca fue su chico y dejó de enfocarse en él, hundiéndose de nueva cuenta en las dudas con Mike.

Mientras Mike dejó en claro consigo mismo que Jeremy sólo era un amigo quien necesitaba de su ayuda, aún que había veces que su yo inverso le hacía dar detalles a Jeremy.

Volviendo con Jeremy, su vida tomó un color más agradable, se sentía vivo.

Pero había algo que nadie sabía y era que Jeremy aún guardaba aquellas navajas que lo hacían sentir mejor hace tiempo atrás en un cajón en su habitación, quizá las había olvidado o aún no quería del todo dejar atrás su pesadilla externa.

Por otro lado, era un día en cual Jeremy venía contento, pues paso una tarde con sus amigos muy cómoda, era algo inefable para decir como la pasó este. Después de despedirse de Mike, quien siempre ya le acompañaba rumbo a su casa, entró a aquella encontrándose a primera vista una nota.

                           ''Regresaré más tarde, la comida/cena está en el refrigerador.


                            -Mamá'' 

Jeremy no le quedó más de otra que suspirar, era la segunda vez que su madre iba a llegar tarde y a tarde era tardísimo 3am o 4am. Decidió comer para hacer su tarea y disfrutar de lo que quedaba de la tarde.


P.O.V Jeremy


Ya había obscurecido y mi padre aún no llegaba, eso me ponía bastante nervioso. Mi nerviosismo aumentó al escuchar como la perilla de la puerta principal se escuchaba moviéndose bruscamente. Me levante de mi cama y me asome desde las escaleras, el miedo y el nervio me estaba consumiendo hasta más no poder. ¿Querían robarnos? ¿Asesinarme? ¿Violarme? Ay.

Ahora estaban golpeando la puerta, seguí mirando la puerta esta vez agachado por si podían verme. Mi corazón palpitaba extremadamente haciendo que mi mano toque con palma abierta mi pecho. Ahora era el timbre tocando desesperadamente, eso me pareció muy raro, mire el reloj y eran las 11pm, seguramente era mi padre o mi madre.

Baje con debido cuidado de las escaleras, estaba sudando del miedo, quizá sea exagerada mi actitud en este asunto, pero sinceramente estaba asustado.

Tome la cadena que estaba enganchada y la quite para luego girar la perilla, abriendo la puerta de la manera más lenta para asegurarme quién era. Aventaron la puerta en mi cara, retrocedí cubriéndome la parte donde me había golpeado y para mi gran sorpresa era mi padre.

Lo mire confundido por un momento luego capté que estaba ebrio. Comenzó a insultarme el por qué diablos no abría la puerta, se acercaba de una forma amenazante que yo respondía retrocediendo asustado. No recordaba lo temible que era en ese estado. ¿Por qué? ¿Por qué tomo? Me sentía tan... decepcionado.

ButterflyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora