Loving you [TK]

002

2020

Jungkook tenía una novia, Jihyo, llevaban algunos meses ya, habían tenido la idea de ir a un picnic en un parque, estar solos un rato allí, como si fueran adolescentes otra vez, pero a Jungkook le gustaba no perder algunas costumbres de esos años, era inevitable.

-Ayer habías dicho algo interesante y no pudimos acabar la charla. ¿Recuerdas?

-Mmm no, creo que lo he olvidado, lo siento. Pero podemos buscar otro tema de conversación para ahora ¿te parece bien?

La chica asintió rápidamente y le sonrió para luego ver a su alrededor buscando alguna fuente de inspiración que le hiciera comenzar alguna de esas charlas interesantes donde Jungkook se perdía tanto que terminabas solo escuchándolo a él, era hipnotizante, era imposible que a alguien no le gustara escucharle hablar cuando se perdía de ese modo en su mente.

- ¿El tiempo? ¿Es un buen tema?

-Mmm pues podríamos estar mucho tiempo, valga la redundancia, ¿algo en específico que quieras traer sobre el tiempo?

-Ahm... no, creo... ah! ¡Ya sé! Los mundos alternos, ¿Qué opinas de ello? ¿Si existen?

-Bueno... realmente hay muy pocas cosas en las que yo no crea, así que... los mundos alternos, si, era un tema recurrente de charla en mis días de universidad, tenía un.... Un amigo, un amigo que le gustaba mucho debatir sobre ello... si, los mundos alternos suenan interesantes, digo... en las películas se ve bastante interesante, en otro mundo quizá soy un vagabundo... o incluso una estrella de cine...tú quizá eres una princesa, o una mujer muy odiada.

Ambos rieron y Jungkook decidió estirar su brazo para colocar un pequeño mechón de cabello detrás de la oreja de la chica, el cual le molestaba para poder ver hacia sus ojos avellanas, pero en cuanto tuvo aquella acción, la chica le detuvo la mano, casi entrelazando ambas, haciendo que su vista fuera en vez de a su cabello, a sus manos, deteniéndose en el anillo, en su propio anillo, no en los de la chica, sino en el suyo, un pequeño anillo de oro, brillaba por el reflejo del sol, era tan sutil, tan delicado a la vez y, él lo había olvidado, pero eso, ese anillo, ese pedacito de oro en su dedo, era el mundo para él, y se había olvidado de ello.

- ¿Gustas un helado? A mí se me antojó uno, yo invito.

La chica asintió rápidamente y él sólo corrió hacia el puesto de helados para pedir uno, aunque con dos cucharas para poder compartirlo, y ahí lo vio, después de tanto tiempo, después de tantos años, él estaba ahí, simplemente viéndolo, solo estaba parado al otro lado de la calle, viendo hacia Jungkook, con un semblante que al menor le pareció más de reproche que de estar feliz de verlo.... Y tenía sentido, lo entendió, había seguido su vida, había continuado sin él, después de haberlo prometido, estaba saliendo con alguien más ahora, y Taehyung lo había visto, le había visto volver con ese helado con dos cucharas junto a aquella chica, le había visto besarla y llevarla hasta su casa de la mano, le había visto hacer todo aquello que había dicho que no quería con nadie más, nadie más, solo con él, solo ellos dos, y ella no era él.

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