Origen

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Noelle vió como el pelicenizo era llevado de emergencia al hospital, en el fondo su corazón se retorció pero no su mente estaba confundida.

- lo siento Asta, pero... Mi madre murió a manos de un asesino, no me relacionare con uno- pensó la peliplata yéndose del lugar.

Así pasaron días donde Noelle claramente no durmió, lo que le había mencionado a Asta era real, después de perder tiempo en una biblioteca local la peliplata se dirigió a la posada que alcanzó a pagar con sus ahorros.

Quién sabe cuántos días habían pasado, sin duda alguna eran más de 3.

En ese tiempo Asta permaneció inconsciente, no sabía usar la nueva forma de Égida y la magia divina de Zeus dañó su cuerpo.

Nero seguía buscando a Noelle, no le importaba si Noelle seguía aceptando o no su amistad, no podía permitir que Noelle no escuchara la verdad.

Después de algunos días más Asta finalmente había despertado, pero se enteró que Noelle había huido.

Lleno de determinación, el pelicenizo emprendió un viaje para buscar a Noelle ya que se fue sin decirle nada y buscaba una explicación.

Cambio de escena

Los límites del cuerpo de Noelle finalmente llegaron, quedándose dormida, uno de los peores errores en su vida, pues la peliplata empezó a soñar.

Dentro del sueño.

Hacía aproximadamente 10 años la joven Silva entrenaba su magia para dominarla y hacer sentir orgullosa a su madre.

Pero el rumor de una chica de la realeza que no podía controlar su magia corrió como pólvora, en muchas ocasiones había intentado ser secuestrada siendo rescatada por su amorosa madre.

- vamos Noelle, dalo todo de tí- Noelle estaba intentando mantener estable una enorme esfera de magia pero esta poco a poco perdía estabilidad.

- magia de acero: restricción divina- ante la pronunciación de un misterioso individuo las extremidades de la peliplata se vieron atadas por resistente acero.

Rápidamente fue secuestrada, la noticia del secuestro de Noelle llegó a oídos de su madre Acier Silva, quien rápidamente su puso en camino para rescatar a su amada hija, no sería difícil localizarla pues si gigantesco maná era mucho incluso para la realeza.

O al menos eso fue lo que creyó al principio, pero quién secuestro a Noelle sabía de eso, no era un secuestrador promedio, su plan era meticuloso y llevo tiempo de planeación.

Había pasado más de un mes y Noelle no aparecía, Acier estaba increíblemente molesta y estresada al punto que no podía tomar decisiones claras.

Por su parte Noelle estaba en un estado pésimo de salud, no había comido nada en semanas y llevaba una hidratación muy pobre.

Su secuestrador la tenía retenida en espera a ser vendida para el reino del diamante.

Pasaron días dónde Noelle se sentía cada vez más débil, ella ya no tenía ni fuerzas para abrir los ojos, cuando escucho que la puerta de su celda de contención se había derribado.

Era su madre, finalmente habia dado con su pista.

- resiste Noelle, mamá está aquí para...- Acier se vio interrumpida cuando el captor de su hija entro en la habitación.

Una potente lucha se desató, el secuestrador era increíblemente fuerte media sus fuerzas con cualquier capitán de orden, poco a poco la balanza se empezó a inclinar a Acier, pues tenía más maestría en combate.

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