28. Confío en tí.

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NARRADOR OMNISCIENTE

Damon y stefan seguían en el hospital, los demás habían ido a descansar a sus hogares, pero ellos ni en broma dejarían ese lugar.

-¿Si te has alimentado bien hermanito?- preguntó damon burlón.

-si- respondió stefan serio.

-porque este lugar está lleno de sangre y odiaria que perdieras el control- siguió con su burla, el ojiazul estaba un poco más fastidioso con stefan desde que él y Catalina se habían vuelto oficialmente novios y aunque ninguno de los dos se lo hechara en cara, él de vez en cuando sentía celos.

-¿No tienes que ir a morderle el cuello a alguna chica linda que se te atraviese por la calle?- preguntó stefan con evidente cansancio.

-¿Acaso ya no puedo pasar tiempo de calidad con el único hermano que tengo con peinado de héroe?- sonrió como típicamente lo hace -pero sabes pensándolo bien, no está tan mal tu idea- dijo levantándose y saliendo del lugar dejando a un stefan un poco atontado, él no lo había dicho en serio pero al parecer damon siendo damon como siempre iba a hacer lo que se le antojara.

Pero en realidad el azabache fue en busca de Catalina, él quería ver con sus propios ojos que ella estuviera bien, ya habían pasado varias horas y era de noche, tal vez ella tenía hambre o frío y él solo iba a asegurarse de que estuviera cómoda y tuviera todo lo que necesitara.

Aunque damon la conocía a la perfección, igual iba a reprocharle que lo que hizo fue estúpido y que de ninguna manera lo volviera a hacer y de verdad deseaba que ella le hiciera caso, pero sabía de sobra que no iba a ser así.

Damon se introdujo por los pasillos e himnotizo a varias personas para que le dieran indicación, pero cuando llegó frente a la habitación que le habían descrito se topó con dos enfermeros en la puerta, esto le pareció sospechoso, porque parecía que la estaban custodiando.

Cuando estuvo más cerca y les pidió que lo dejarán pasar, estos tensionaron la mandíbula y se negaron.

-¡dejenme pasar!- el ojiazul aún más cabreado trato de himnotizarlos, los enfermeros se miraron entre sí y uno de ellos dijo.

-claro- y extendió su mano señalando la perilla de la puerta, mientras que el otro trato de apuñalar a damon con una estaca, estaca que terminó en su mismo corazón, el azabache seguía luchando con el otro enfermero hasta que lo mató.

Se apresuro a entrar en la habitación y encontró a Catalina pálida en la camilla con tubos en ambos brazos que transportaban su sangre a bolsas que colgaban a cada lado de ella.

Rápidamente saco con cuidado las agujas que ya tenían sus brazos amoratados -¿Damon?- balbuceo ella débil y somnolienta -hey- dijo él y comenzó a cargarla con cuidado, ya no la iba a dejar más en ese lugar, el mismo se encargaría de paladearla en casa.

Rápidamente saco con cuidado las agujas que ya tenían sus brazos amoratados -¿Damon?- balbuceo ella débil y somnolienta -hey- dijo él y comenzó a cargarla con cuidado, ya no la iba a dejar más en ese lugar, el mismo se encargaría de paladearla en ...

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Perseguida (Damon Salvatore Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora