Capítulo 15. La Perdición del Héroe.

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Pocos años atrás en el tiempo.

Cuando Bopo y Gaena recibieron de vuelta al príncipe Dorba en Paso Caol, les fue difícil reconocerlo. Su apariencia era la misma de siempre, pero su comportamiento distaba mucho del habitual. No se percibían en él esa humildad y empatía que tanto lo caracterizaban. En cambio, estaba ahí un hombre pedante con un carácter fácilmente irritable que no escuchaba consejos ni de la mujer a la que amaba. No fue necesario que les diera un reporte de la misión, Bopo supo de inmediato que él estaba teniendo éxito en ella porque pudo sentir que había mucho más Goan en su interior. Intentaron enterarse de los pormenores del viaje, pero resultaba complicado dialogar con él, pues toda respuesta era siempre condescendiente y brusca. Ambos estaban muy sorprendidos con esa nueva actitud del príncipe, Dorba no era una persona que se dejara nublar el juicio por poseer más poder. Gaena pensó que tal vez ese comportamiento se disiparía al día siguiente, por lo que intentó pasarlo por alto. Desgraciadamente el actuar de Dorba no cambió en los días venideros, situación por la cual Bopo se preocupó debido a una hipótesis que empezó a generarse. Después de mucho tiempo de análisis, el viejo llamó por separado a Gaena y le dijo su conclusión:

-Lo lamento mucho. Todo es mi culpa. Me doy cuenta de que no sólo hice que absorbiera el Goan de otras personas, también rasgos de su personalidad. Acabo de arruinar a tu esposo.

-¡¿Qué dices, Bopo?! ¿Hay alguna manera de revertir este proceso?

- Quizá sí, pero tendremos que darnos prisa. Debes considerar que a mayor tiempo que él pase con esas personalidades despreciables fluctuando en su interior, más asimilación de ellas tendrá su organismo. Sólo se me ocurre un modo lógico de revertirlo, haciendo que se desprenda de todo ese Goan antes de que se mezcle cada vez más con su espíritu. Pero no sé si podamos permitirlo, necesitamos ese poder para hacerle frente a Moal.

-¿Cómo que necesitamos su poder? ¡Tú eres el transmisor original!, podrías reabastecerlo de inmediato sin problemas y con ello ayudarlo a enfrentar a Moal.

-No es tan sencillo, mi poder está cerca de su ocaso. Hoy en día, puedo sentir que Moal es más poderoso que yo.

Gaena quedó boquiabierta tras escuchar esa confesión del heredero original del Goan rojo.

-Si Moal sigue ampliando la brecha con los demás, el mundo estará condenado –añadió el anciano –. Sólo hay otra opción que me viene a la mente para limpiar ese Goan al interior de Dorba, pero es muy complicada y no hay ninguna garantía de que lo puedan conseguir a tiempo.

-¿Cuál es esa opción, Bopo?

-Que Dorba encontrara el Goan azul. Con él podría renunciar a todo su Goan y sustituirlo por esa versión que es mucho más poderosa, logrando eliminar en el proceso toda la carga negativa que viene añadida en su Goan actual.

-Está bien, haremos cualquier cosa por salvarlo. Saldremos hoy mismo a intentar localizar el Goan azul.

Gaena trató de convencer a Dorba de iniciar la búsqueda del precioso recurso azulado. Insistió en que ella lo haría por su cuenta de todos modos, por lo que el instinto protector aún presente en Dorba no le permitió dejar hacer sola esa misión a la mujer que amaba. Comenzaron a recorrer pueblos y ciudades, con la única referencia en mente de que sabían que el Goan "estaba ubicado en el ser en el que menos esperarían encontrarlo", como Rioya le mencionó antes a Dorba. En medio del trayecto fue notorio que ya no eran más la pareja perfecta, resultaba complicada la convivencia diaria para Gaena con ese nuevo hombre. En sus periodos de lucidez, Dorba seguía siendo el más encantador y amoroso, pero por momentos tenía arranques groseros y desconsiderados que llegaban a herir sentimentalmente a su pareja. Ella decidió soportar esos esporádicos malos tratos para priorizar la búsqueda del Goan azul y con ello poder evitar que esos desplantes se terminaran por volver la norma en su relación. Visitaron a los poblados con las razas más extrañas del mundo, creyendo que quizá nadie esperaría nunca ver el Goan azul depositado en un pequeño duende del bosque o en las milenarias luciérnagas de agua en la montaña. Fracasaron una y otra vez en su búsqueda, aunque en su lugar terminaron encontrando algo que nunca hubiesen deseado hallar.

Goan. El Poder Transferido. Vol 1.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora