¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Estar para esa persona que amas o incluso darías tu vida por ella y que jamás se entere de lo que tu sientes por esa persona. Aún si están en una situación de vida o muerte, o en este caso de sobrevivir o ser mordido.
En todo caso hay que sobrevivir por amor o por alguna esperanza que te quede.
Iba saliendo de la escuela junto a Gyeong-su y mi primo Cheong-san, solo veníamos hablando de que las materias estaban muy difíciles.
-Hoy abren el pollo ¿no? -le pregunté a mi primo y este solo me ignoro- Idiota...
-No lo sé... Creo que no -dijo y me enseñó su celular.
Dejándome ver los nuevos carteles de el del local de pollo de mi tia, no pude evitar reírme.
-Están muy buenos -dije y corrí un poco para que el no me diera un golpe.
-Oigan vamos al restaurante de la mamá de Cheong-san -ordenó On-jo cuando se nos estaba acercando.
-Pero esta cerrado -dijo Cheong-san y yo solo negué.
-Mi tía dijo que hoy iba a abrir y que quería que estuvieramos ahí, para probar las nuevas recetas -dije y choque los puños con I-sak, para luego seguir caminando.
Habíamos estado hablando de cualquier cosa mientras llegábamos al local de comida. No podía evitar emocionarme de estar ahí con mis amigos.
-Bien aquí esta la comida -dijo mi tia y empezamos a comer.
-¿Escucharon lo del profesor de ciencias? -preguntó I-sak y solo negué.
-Hablas de que dicen que huele a muerto -habló esta vez On-jo y escuché como Cheong-San hacia un ruido con la boca.
-Quién les dijo esa tonteria... ¿Acoso fue Nayeon? -preguntó Cheong-San y las dos amigas asintieron.
-Ella a olido de todo menos a muerto, así que cree que así huele -dije mientras comía mi pollo- Pará ser sincera desde que su hijo desaparecio a estado muy extraño.
-Si no recuerdan que la otra semana apuntó algo y luego salió del salón. -argumento I-sak.
-¿Que tal esta la comida? -preguntó mi tía llegando con nos órdenes de pollo para nosotros.
-Bien -dijimos I-sak y yo.
-Algo salado -dijo On-jo y mi tía solo asintió.
Ya sabía que a ellos les importaba mucho la opinión de On-jo, por alguna razón que desconozco.
Despues de un rato de seguir hablando, teníamos que volver a casa. Vi cómo Gyeong-su y I-sak salían corriendo yo estaba hasta atrás ya que no tenía ninguna prisa por llegar a casa.
