Unos cuantos rayitos por aquí y unos cuantos truenos por allá hehe.Más de treinta mensajes de Marco y más de diez llamadas perdidas. Debería de estar trabajando, pero no paraba de hacer que mi móvil vibrara cada poco después.
Sería más fácil si simplemente le dijera algo, pero no quería.
Había salido a tomar el aire —cosa que a Marco obviamente le había parecido una idea horrible —llevaba al menos dos semanas encerrada por decirlo de alguna manera en su piso, una experiencia horrible por cierto.
Jared, el poco tiempo que estaba en casa, estaba cabreado y Celia ponía excusas muy malas para salir con su novio, cosa que hacía que Jared se cabreara más.
Eran peleas constantes en esa casa.
Además Marco pidió unas semanas de descanso, según él para relajarse, pero las mentiras de Marco se veían a kilómetros.
Por fin llegó el día tan marcado en mi calendario, incluso me había despertado para despedirle desde la puerta con más entusiasmo del que pensaba.
Me vestí con ropa cómoda y salí tan rápido como pude para que Jared no me viera y se chivara.
Cosa que igualmente hizo.
El parque estaba más tranquilo de como lo recordaba y a pesar de que el cielo parecía que se iría a caer en cualquier momento, los pájaros iban de un lado a otro haciendo cantidad de ruido, sin duda mejor que el de mi teléfono sonando de nuevo.
¿Es qué no se daba cuenta que no le haría caso?
Sin mirar la pantalla apagué el teléfono, así no escucharía al dichoso sonar.
Caminé, caminé y caminé hasta que me encontré a mi misma delante de la puerta de mi casa.
Revisé el buzón en busca de alguna carta, recibos concretamente, pero nada, solo pelusas. La hierba estaba bastante alta y la entrada de la casa necesitaba que alguien la barriera con urgencia, de seguro se tenía que ver así también por dentro.
Por desgracia mis llaves las tenía Marco como parte del acuerdo así que no tendría otra opción que pedírselas si quería hacer un poco de limpieza, al menos quería que mi casa volviera a ver un trapo o algo.
Abrí la puerta de la cafetería de su padre y todo el mundo se estaba refugiando de la lluvia que yo no había podido evitar.
Pude ver por el rabillo del ojo como un grupo de adolescentes se reían por lo bajo de mis pintas, toda mojada y con el pelo pegada a la cara, toda una belleza.
Me acerqué a la barra esquivando a la gente y pasando de la cola, porque para que nos vamos a mentir, nunca la había hecho y no pensaba hacerla ahora.
Había una chica recogiendo su chocolate caliente y me posicioné al lado suyo apoyando la barbilla en la mano sobre la encimera.
Marco pasó de tener una encantadora sonrisa mientras le devolvía sus vueltas a la chica del chocolate a una con el ceño más fruncido que le había visto nunca.
— Jerry, encargate de la caja.
— Yo no puedo que ...
— No era pregunta, levantate y coje dinero si quieres llevarte un trozo de pan a la boca el mes que viene.
— Está bien, que genio. — Levantó las manos a modo de rendición y se posicionó enfrente de la caja recibiendo más pedidos.
Marco pasó su mirada que parecía que echaba fuego hacía mí y levantó una pequeña abertura de madera de la encimera para dejarme pasar. Me cogió del brazo y me llevó hasta fuera, una zona techada.
ESTÁS LEYENDO
By your side
Mystery / Thriller"A veces los pasados qué más crees olvidados son los que más presencia tienen, aún que no los veas" - [ 19/11/21 ] -> primera publicación [ 14/11/21 ] - [ / / ]