Esta sera una historia diferente a lo que estoy acostumbrado, sin embargo dadas las fechas actuales comenzare a escribir este fanfic en dedicatoria a San Valentín.
No me culpen si no es muy romántica, no soy bueno para este género pero dare lo mejo...
Misaki: Hay Dios hay Dios hay Dios que se supone que deba hacer ahora¡¡¡¡¡¡¡
Tras haber afrontado la muerte en reiteradas ocasiones pasando desde fortuitos accidentes los cuales en mas de una ocasión casi acaban con ellos, a una cocinera poseída por la calamidad coronando con un atentado directo provocado por la presión y la locura de sus propios compañeros..... Sin embargo los múltiples intentos de la calamidad por llevárselos no serian nada comparados con la travesía por sincerarse en lo que para muchos es considerado una de las fechas mas importantes y a su vez mas desafiante tanto para parejas recientes como veteranas, San Valentín un día dedicado al sentimiento del amor como el aprecio a la amistad, un evento que ocurre tan solo una vez al año sin embargo con tanto poder que era capaz de conducir a cualquier persona sin importad su edad o estatus hacia la locura. Misma situación que los supervivientes de la calamidad ocasionada por la clase maldita sin embargo y pese a todo pronostico nuevamente serian capaces de superar la adversidad dando el siguiente paso hacia una relación formal mas haya de la simple amistad cerrando así un ciclo dándole paso a una nueva etapa en sus vidas. Sin embargo y como siempre los problemas no pueden esperar solo que en esta nueva ocasión seria Misaki quien tendía que cargar con todo el peso ahora que una nueva amenazaba para su salud mental se aproximaba y esta no era nada mas que el cumpleaños de su ahora novio Koichi
Misaki: ¿Por qué el tiempo tenia que pasar tan rápido? ¿Acaso no estábamos en julio?
La azabache revisaba el calendario de su habitación una y otra vez esperando que así de alguna manera mágicamente el día fuese cambiado por cualquier otro, sin embargo en esta ocasión ninguna fuerza desconocida la arrastraría ya que por mucho empeño que le pusiese hoy seguía siendo 29 de octubre, día que no desaparecería hasta que el reloj marcase las 00:00 en punto lo cual significaría que tendría todo este tiempo para pensar en que regalarle, sin mencionar que el hecho de ahora al ser su novia su presente debía ser el que mayor impacto generase.
Misaki: Aqua-sama que debería hacer en un momento como este
Se preguntaba con desesperación al ver como los minutos pasaban mientras ella seguía postrada en su cama sin que una idea pasara a saludarla. Es en ese momento que a falta de inspiración tomaría una chaquete y saldría a caminar esperando que le mismo pueblo le pudiera proveer alguna respuesta. Tras despedirse de su madre la búsqueda daría comienzo aunque en un principio parecía un esfuerzo inútil poco a poco daría a relucir su creatividad al igual que mente de artista, sin embargo el único inconveniente seria precisamente su única salvación al tener una perspectiva un poco diferente a lo que normalmente se podría esperar. Momento que quedaría demostrado al pasar por una dulcería recordando el enorme gusto de que su novio tenia por el azúcar, fue asa que una vez adentro compraría la paleta mas grande que pudiera pagar ya que según su logica, las paletas son dulces, a Koichi le gustan, es grande y todo en gran medida es bueno, es un articulo local por lo tanto no abría problemas con el envió o escrito en un idioma diferente, por lo tanto este seria el obsequio perfecto....... ¿Verdad?
Misaki: A quien quiero engañar esto es nefasto
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