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• ɴᴀʀʀᴀ: _________ •
—¿Presentara cargos?—preguntó Sasha.
—Obviamente, acaso no viste lo que estaba sucediendo ... ese bastardo estaba apunto de abusar de ella— respondio Mikasa.
—Creo que ... la cuestión de los alucinógenos no le beneficiaría mucho ..—escuche la voz de Jean.
—No debiste dárselos imbecil, es la segunda vez que termina en una situación asi—respondió Mikasa.
—¡QUE YO NO LE DI NADA!
—¡Basta! No ganan nada discutiendo, veremos que opina ella a el respecto—comento Hange.
—Ella se negará a presentar cargos y no me arriesgare a que esa bestia le haga daño de nuevo, si vuelve a acercársele lo mataré ... —la voz de Levi me sobresaltó el corazón aún en mi estado soñoliento, los escuchaba a lejanía.
Un silencio invadió la habitación.
—Estuviste apunto de hacerlo anoche ..—comento Jean.
—Si no hubiera sido por ustedes ...
—¿¡Puedes calmarte con un carajo?!—grito Mikasa.
—¡Obligame, mocosa estupida!—grito Levi.
—¡Mikasa , Levi BASTA! —los silencio Erwin.
Un silencio reino y un suspiro de Levi se escuchó cuando me incorporé sobre la cama, todos estaban allí en la habitación de él, imaginé que esperando a que reaccionara.
Me miraron con atención y no veía más que preocupación en sus rostros, mis amigas se acercaron rápidamente y Levi se mantuvo frente a mi con los brazos cruzados y sin palabras.
Escuche a todas hablar al mismo tiempo sin poder entender algo.
—Vamonos ... démosle a Levi privacidad—comentó Erwin y todos obedecieron.
Los mire retirarse en silencio y a Erwin hechar un vistazo antes de atravesar aquella puerta, Rivaille seguía inmóvil, veía ira y tristeza en sus ojos y camino hacia mi dirección con pasos elegantes como era habitual, se sentó en un lado de la cama para mirarme de cerca y pensó en algo antes de hablar.
—Perdoname ..
Esas palabras me provocaron confusión.
—Debi ... estar allí contigo y no dejarte sola, no volverá a pasar ... te lo prometo.
—No tienes ... —comenze y me percaté de que mis cuerdas vocales sonaban rasposas y un dolor me invadio al hablar.
El negó en silencio y apretó los labios, su mano tomó la mía y suspiro.
