𝙾𝚗𝚎 𝚂𝚑𝚘𝚝𝚜↬ 𝑨𝒊𝒅𝒂𝒏 & 𝑪𝒊𝒏𝒄𝒐

Hard.

One Shot pedido. Espero que te guste<3

1963.

— Primero que todo quería disculparme con ustedes— habló el ojiverde— el salto en el tiempo fue tan incierto que terminé perdiéndolos en diferentes años, pero el lado bueno es que estamos juntos por fin.

Ante esto,  sus hermanos le dedicaron una mirada obvia, ciertamente lo único que podía hacer Cinco era disculparse.

— ¿Alguien hizo algo que alterara la línea del tiempo?— preguntó.

Los Hargreevs se miraron entre sí y al final, se delataron entre ellos.

— Allison se casó.

— Pues tu iniciaste una secta.

— ¡Es un centro de convivencia!

— ¿Tú, Cinco?— cuestionó el rubio— ¿No hiciste nada que alterara la línea?

— ¿A que se debe tu tono tan hostil, número uno?

— No lo sé, hace poco te vi con una persona que, podría apostar que ninguno de nosotros conoce.

— ¡Oh, eso!— dijo sin preocupación— que bueno lo mencionas porque...

Sin dejar que Cinco terminara la oración, su brazo fue levantado en dirección tuya anunciando su  entrada al lugar.

— ...Estaba por presentárselas— culminó— Chicos, ella es mi novia.— comentó orgulloso.

Hubieron varias reacciones: Klaus se ahogó con la bebida que estaba tomando, Allison abrió los ojos con esa característica expresión de sorpresa, Diego pareció no haber sido asombrado por la noticia, Vanya alzó sus cejas a su tan conocida forma y Luther, Luther pareció palidecer ante eso.

— ¿N-novia?— peguntó la morena— ¿Desde cuándo tienes novia?

— Uhm... no mucho en realidad, dos o tres días.

Sus hermanos no encontraban nada de lógica.

— Es un placer conocerlos en persona— sonrió— Ustedes no tienen ni idea de quien soy yo, pero yo, si los conozco.

Todos miraban con extrañeza a la chica, su ropa, su edad (porque era una niña de unos trece años y Cinco sólo aparentaba serlo) y sobre todo ¿por qué sabía tanto sobre ellos?

— ¿Dónde la conociste, Cinco?— volvió a preguntar Luther.

Al ojiverde le molestó por completo que todos pasaran de largo de ella y que ignoraran tu saludo tan olímpicamente, como si no estuvieras allí o no existieras.

— ¿Eso importa?

— Claro que si— concordó Allison— Bueno, me refiero a que, de la nada llegas diciendo que tienes novia... es normal que queramos saber sobre ella.

— No tengo por qué-

— En la Comisión, ¿no?— dijo Diego— su ropa, su edad, la expresión en su cara, todo derrocha las mismas vibras que esos malnacidos.

— ¿Desde cuándo eres experto en eso?

— Cinco tiene una lengua muy floja cuando está borracho.

— Muy listo, Diego— aludió el ojiverde— sólo te voy a pedir que no te insinúes a ella como al resto de la Comisión.

— ¿Y entonces cómo?— respondió el rubio con dureza y se levantó en dirección a Cinco— ¿Qué? ¿Ella viene, te habla bonito, te seduce y de pronto olvidas que su trabajo era matarnos y que casi lo logra?

— No esperaba menos de ti, Luther, eres el mismo paranoico que siempre. ¿Verdad, chicos?

Pero nadie respondió.

— Luther tiene razón— contestó la tercera.

— Ellos casi nos matan, nos persiguieron e incluso entraron a nuestra casa para asesinarnos justo allí— completó el moreno— ella no es la excepción, y no merece ni un gramo de gentileza.

— ¿Y no se les ocurre una oportunidad para conocerla bien, idiotas?— dijo con irrites.

— Ninguno de esos malditos se paró a conocernos para darnos una segunda oportunidad.

— Lo mejor es que se vaya.

— No queremos a esos sangre sucia aquí.

— ¿Qué te garantiza que no está usándote para después traicionarte?

— Ellos sólo piensan en una cosa: matar.

Tantos fueron los insultos y reclamos por parte de los mayores que simplemente la chica salió corriendo con su corazón roto y sus ojos empapados en lágrimas.

Cinco salió detrás suyo, tomando su mano para impedir que siguiera corriendo y que no se alejara de él.

Cinco la giró y la enrolló en sus brazos ahogando sus sollozos en su pecho.

— Lo lamento mucho, son unos idiotas.

— N-ni siquiera m-me dejaron decirles q-que yo escapé de ahí para ayudarlos.

El chico comenzó a dar caricias en el cabello de la menos alta, sintiendo el enojo correr por sus venas y el odio hacia sus hermanos por ser tan necios como el señor que los había criado.

— Pronto lo sabrán, y te van a adorar— comentó— yo lo sé.

No me morí por si andaban con el pendiente.
¿Cómo están?
Una disculpa por desaparecer tanto tiempo, esto de mantener el promedio arriba de 90  consume mucho tiempo y energía.

Platíquenme como han estado, si les gustó, cualquier cosita. Lqm<3