Capítulo 1

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Vincenzo estaba en shock, Emilia su mejor amiga había muerto de un ataque al corazón sin pleno aviso, en el funeral el abogado que al parecer ella había contratado por la ausencia de Vincenzo le entregó unos papeles notificando que ahora era el tutor legal del pequeño Alejandro.

—Ella comenzó a sentirse mal y lo siguiente que supo fue que no le quedaba mucho tiempo de vida. —Explicó el abogado. —Me encargó arreglar todo para que el niño no fuera enviado a un orfanato, como usted es su padrino la señorita Emilia le dejó al niño.

Luca negó con la cabeza gesticulando un 'Yo no lo sabía' cuando Vincenzo lo miró pidiendo una explicación.

Emilia había sido como una hermana para Vincenzo, ella había sido la primera amiga que hizo cuando fue admitido en la escuela de leyes.

El abogado le dió a Vincenzo una pañalera junto a una maleta. Vincenzo le tendió la maleta a Luca, arrepintiéndose enseguida porque el abogado le entregó un bulto en una manta celeste. —Cuide bien de él Señor Cassano.

Vincenzo se quedó quieto sin saber cómo cargar al niño que tenía en los brazos. Al menos el pequeño no estaba llorando.

Vincenzo gimió de horror al escuchar el llanto del bebé. —Oh, díos mío. Cállate por favor.

Luca hizo una mueca cuando Vincenzo le preguntó ¿De dónde se apagan los bebés? —Lo buscaré en Internet, Consigliere.

La abuela de Vincenzo los miró desaprobatoriamente. —Estos hombres de hoy en día, uno pensaría que sabrían lo básico sobre niños. El pequeño tiene hambre, solo dale algo de leche.

—¿Con o sin lactosa?

Doña Bianca suspiró. —Mi niño, podrás ser un gran Consigliere pero eres un idiota.

Luca se sintió avergonzado cuando regresó de la tienda con dos botellas de leche descremada y Doña Bianca le rodó los ojos.

—Vamos, pequeños idiotas. —Les dijo tomándolos de las orejas. —Vayamos a casa para que el pequeño pueda dormir.

En casa, Doña Bianca les mostró como cambiar el pañal y preparar el biberón del pequeño. Les dió las pequeñas indicaciones de no dejarlo solo en la cama y de ayudar a repetir al bebé.

La risa de Cha Young resonó por toda la habitación, fue sorprendente ya que se suponía que estaban hablando por teléfono y Vincenzo no lo había puesto en altavoz.

—Shhh, vas a despertar al pequeño monstruo.

¡Lo siento, lo siento! Es solo que ¡Es increíble! Ahora eres padre.

—Me hubiera gustado poder prepararme mejor, Emilia no me dijo nada sobre su enfermedad y apenas regreso a Italia me encuentro con todo esto.

Bueno, tu no le dijiste a dónde ibas y tampoco le llamaste o algo. —Razonó la abogada. —Es comprensible que no te haya podido decir nada.

—Pero tampoco se lo dijo a Luca.

Bueno, Luca también vino a Corea y se estaba escondiendo ¿Recuerdas?

Vincenzo murmuró un pequeño 'Mmh'  —¿Y Han Seo?

Él está bien, fue con el señor Nam a comprar algo para desayunar.

—Me olvidaba de la diferencia de horario. Son las 12:30 de la noche y el pequeño bulto apenas se quedó dormido hace unos minutos.

Ser padre no es fácil, ¿Eh? —Cha Young se rió. —¿Puedes enviar una foto? Quiero conocer al bebé.

Padres por accidente [Vincenzo/Han Seo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora